Novelista y director, Manuel Ríos es el coordinador de guiones de Sin identidad, serie de dos temporadas que hoy pone su fin definitivo. Hoy se sabrá hasta qué grado de venganza cumple Mercedes Dantés (Megan Montaner, María originalmente) contra quienes le hicieron la vida imposible. El nombre de Manuel Ríos, autor de la novela Círculos, está unido a series de Globomedia como Médico de familia o Compañeros, y más recientemente, tras pasar a Boca a Boca o Diagonal, miniseries como Soy el Solitario o Historias robadas.

-Sin identidad pertenece a la remesa de series españolas que han evolucionado hacia un criterio de complejidad y calidad que dista de lo que se hacía quince años atrás ¿cómo se ha producido esta evolución en cadenas, productoras y espectadores?

-Ha sido una evolución rápida porque el público es cada vez más exigente con las series. Sin identidad ha sido una serie grabada sin platós y con un despliegue de medios que es también la exigencia de la cadena, Antena 3, que te piden más. Manda la tendencia de rodar en la realidad y esta serie ha tenido un esfuerzo mayor, con 15 secuencias por capítulo. Hemos grabado en casas de lujo, en cabañas en mitad del bosque, un trabajo de localización importante. Y recalamos en un hotel de Chiclana de la Frontera, con algunas escenas de estos últimos episodios.

-Como coordinador de guiones, ¿con qué equipo ha contado para una ficción con tantas tramas entrelazadas?

-He trabajado con tres guionistas y una analista de guión. Victoria Valvera es un actriz que como analista nos ha orientado en adaptar a lo más real los diálogos y las actitudes de los personajes.

-La analista permite que los diálogos no caigan en el tono de un vulgar culebrón...

-La experiencia de ella y de todos nosotros nos permite imaginar cómo son esas escenas sin caer en la sobreactuación. Nuestra misión es crear diálogos posibles, creíbles, dentro del dramatismo. Hacer todo lo más verosímil, con expresiones reales y palabras de la calle.

-¿Los actores son muy dados a interpretar y alterar sus frases?

-En el caso Verónica Sánchez, con su acento andaluz tan marcado para su personaje, ha colocado giros para hacer a Amparo más auténtica, pero lo habitual es que todos los actores se atengan a lo que expresa literalmente el guión.

-¿Cómo han llevado los actores una serie que obliga a tanta tensión?

-Se han concentrado y se ha logrado un nivel excelente. Hemos creado tensión, pero sobre todo hemos pretendido dibujar personas. Nos han llegado comentarios de que la protagonista María-Mercedes se equivoca mucho, pero esa era la intención, de tener ante nosotros personas normales, que no son infalibles. También está Amparo, que no sabemos si es buena o mala, tenemos dudas sobre ella, que es lo que queríamos impregnar.

-Y tenemos al gran malvado, a Enrique Vergel...

-Para llevar a Enrique a sus extremos Tito Valverde se ha tirado al barro para hacer este papel. Lo veréis esta noche, que aún es capaz de dar vueltas de tuerca a su personaje.

-Antes de El Comisario sólo lo relacionábamos con papeles cómicos.

-Es una muestra de lo gran actor que es. En El comisario demostró que era capaz de llegar lejos en el género dramático y en Sin identidad hace un trabajo enorme.

-¿Qué veremos esta noche?

-Un capítulo final absorbente, complejo, lleno de sensaciones, que va a impactar. Sin identidad ha sido un reto en todos sus aspectos y hay que agradecer la confianza de Antena 3.

-¿Qué le gustaría escribir para televisión y que percibe que aún no se ha aprovechado en antena?

-Me encantaría hacer una serie de relaciones personales entre adultos. Como Dates británico o el Cites catalán. Parecen sencillas, pero son un trabajo muy grande de guionistas y de actores. A pulso.

-¿Le gustó el estreno más sorprendente de este año, El ministerio del Tiempo, de un equipo que trabajó con Diagonal?

-Es una serie diferente, hecha por buenos amigos, grandes guionistas, que tiene mucho camino por delante. Un ejemplo de cómo han evolucionado las series en la televisión en España.