Toros

Morante y Talavante, a hombros, y Manzanares cae herido

Granada vivió una gran tarde de toros. El momento final, la salida en hombros de Morante de la Puebla y Alejandro Talavante, en la que Manzanares no pudo participar por estar herido, era el resumen perfecto de una tarde completa, intensa, atractiva y absorbente, según informa Mundotoro. Morante la inició con una faena sublime al buen primero, una verdadera obra maestra para la que se debieron pedir las dos orejas. Sólo se pidió una, que paseó feliz y vacío. Le tocó hacer un esfuerzo en el cuarto y lo hizo, todo corazón para sacar lo mejor del toro y cortar otra oreja. Alejandro Talavante ve toro en todas partes. Por eso le cortó una oreja al tercero tras un faenón que no firmó a la primera con la espada y paseó las dos del quinto. Con ése firmó un faenón, valiente, creativo y soberbio. Todo fue posible, también, gracias al juego de una corrida de Zalduendo correctamente presentada y muy interesante. Salvo el sexto, que estaba reseñado como quinto, todos los toros tuvieron virtudes y teclas. La cara negativa de la tarde la vivió José María Manzanares, cogido dos veces por el segundo de la tarde, lo que le impidió lidiar al quinto.

Manzanares sufrió "dos varetazos. Una en la cara exterior del muslo izquierdo. Otro en la cara anterior del hemitórax, que provoca la desinserción del octavo arco costal izquierdo y luxación del cartílago costal. Trasladado al Hospital Virgen de las Nieves. Antes de decidirse su traslado, fue infiltado porque su intención era lidiar al quinto, pero finalmente no le fue posible".

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