Hace dos semanas justas que la selección española de baloncesto se proclamó campeona del mundo de baloncesto, pero es un logro que perdurará. Dos de los malagueños que contribuyeron al título, Ángel Sánchez-Cañete y Enri Salinas y que trabajan para el Unicaja, siguen recibiendo reconocimientos.
El ayudante de Scariolo y el preparador físico ya recibieron la ovación del Martín Carpena el sábado en el duelo ante el Iberostar Tenerife. Y este domingo también fueron agasajados por el Málaga, que en el partido ante el Sporting les hizo entrega de sendas camisetas con el número uno y sus respectivos nombres. Se las hicieron entrega los consejeros consultivos Ben Barek y Martín Aguilar.
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