Dulce resaca para el Unicaja, que selló en Frankfurt su pase al Top 16 de la Eurocup. Lo hizo sin Jaime Fernández, lo que da empaque al equipo. Primer partido de esta temporada sin el escolta, que aún anda entre algodones después del edema óseo que padece en la meseta tibial de su pierna izquierda. Sin descanso, la plantilla volvió al tajo en sesión matinal en este jueves, donde el madrileño siguió al margen del grupo. 

El manchego no pudo contar con el exterior en el entrenamiento que dirigió en la pista auxiliar del Martín Carpena. Jaime continúa con su proceso de recuperación y apurará para llegar al choque frente al Morabanc Andorra, un partido significativo para él. El cuerpo técnico y el jugador decidirán este viernes en la sesión previa al viaje que ruta se toma. La consigna es clara, no se quieren correr riesgos por la altura de la temporada en la que se está. 

"Hay que ir evaluando día a día", respondía Casimiro cuando se le preguntaba sobre qué tiempo estará fuera el internacional antes de viajar a Alemania: "Hemos tenido suerte porque la caída fue fea. Hay que evaluarlo día a día, depende su tolerancia al dolor, puede ser relativamente corta la ausencia pero se puede alargar. Cuando volvamos evaluaremos, veremos su disposición y cómo tolera el dolor".