Antes de llegar a Zaragoza, que le abrió la puerta en la ACB, Shermadini había pasado por clubes históricos del calibre de Panathinaikos, Maccabi Tel Aviv u Olympiacos. Había sido entrenador por Obradovic y tenía una Euroliga con su palmarés. Pese a ello, el gigante georgiano necesitaba sentirse importante. Lo consiguió en la ciudad maña, donde el fallecido José Luis Abós lo convirtió en pilar de un equipo que rebasó sus topes. Esa plantilla que le dio un revolcón al Unicaja en la Copa del Rey de Málaga en 2014. 

El pívot, que tuvo una segunda etapa como rojillo, ahora está en el otro bando. "Fue una buena experiencia. Pasé un buen tiempo allí, jugando con Viktor Sanikidze, con un gran entrenador en aquel momento… Hay buena gente allí en Zaragoza. Estoy contento con que mis viejos amigos de allí vengan a Málaga para encontrarnos de nuevo", explicó el poste, que vive su mejor momento como cajista: "Sólo puedo agradecérselo a nuestro entrenador y a mis compañeros porque siempre intentan darnos balones interiores a mí o a Mathias Lessort. Intento ayudar al equipo, jugando bien, para conseguir ganar. Me lo exijo en cada partido". 

Pese a que luce con balance negativo, le gustó a Shermadini lo que vio de este renovado Tecnyconta de Fisac, que alabó al club de Los Guindos también. "Es un muy buen equipo, tienen jóvenes jugadores, nuevos jugadores, que luchan cada partido y juegan increíble. Han perdido algunos partidos pero seguro que mejorarán conforme avance la liga, con cada entrenamiento. Por supuesto, ellos vendrán aquí con la intención de ganar", explicó de uno de sus ex equipos en España. 

El Unicaja llega en la cresta de la ola, tras apilar varios triunfos seguidos. "Estamos mejorando en cada partido. Creo que estamos en buena forma, jugando un buen y rápido baloncesto, y estamos estudiando cada partido. Como he dicho, el Tecnyconta Zaragoza viene a nuestra cancha y estamos listos para jugar este encuentro y pelear por disfrutar una victoria más", terminó.