El Unicaja volvió de Valencia con un sentimiento contradictorio. No se vio inferior al equipo taronja, al que dominó en varios tramos. Tuvo el partido en la mano pese a un nefasto tercer cuarto. Pero la realidad de la tabla, implacable, le puso techo. Siendo realistas, el quinto puesto es lo máximo a lo que puede aspirar al final de la temporada regular el equipo de Joan Plaza.

Y es que los números dicen que tan cerca está subir al cuarto lugar como bajar al undécimo. Con 17-12 marcha el Unicaja. Con 20 victorias, de segundo a cuarto, están Baskonia, Barcelona y Valencia, aunque los vitorianos con un partido menos por el aplazado de esta semana por estar inmerso en el play off de la Euroliga. Por detrás del Unicaja, una retahíla de equipos que le pisan los talones. Empatados a 17 triunfos Gran Canaria y MoraBanc Andorra, con los que aún tiene que jugar en los partidos que quedan de temporada regular. En apariencia, los más complicados. Pero en estos momentos de temporada puede morder con más fuerza un equipo que pelea por la salvación, como sucederá en los casos de Bilbao, Tecnyconta y Joventut, con los que también habrá que medirse hasta el 20 de mayo, fecha prevista para la última jornada de Liga.

Encontrarse en cuartos a los taronjas, una vez más, sería la situación idónea ahora mismo

Con 16 está el UCAM Murcia, en la frontera del octavo puesto. Y con 15, Montakit Fuenlabrada e Iberostar Tenerife. Con 14 figura el Movistar Estudiantes, que aún no dijo su última palabra.

Realistamente, la situación idónea para el Unicaja sería medirse en cuartos de final con el Valencia Básket, acabando cuarto y quinto, y dirimir ahí quien tiene la plaza de Euroliga (salvo que otro rival por debajo en la tabla jugara la final). Pero antes de ello hay que conseguir amarrar una posición para la que hay más aspirantes. Depende el Unicaja de sí mismo para hacerlo, pero también están en la misma situación MoraBanc y Gran Canaria, que pujan fuerte.