Mejorar la seguridad de los pacientes operados. Con este objetivo, la Unidad de Anestesia del Clínico puso en marcha ayer nuevos protocolos de actuación en las áreas de quirófanos, reanimación y recuperación postquirúrgica. Un manual describe de forma clara y concisa qué hacer ante las situaciones urgentes más frecuentes que se presentan en esas áreas del hospital como reanimación en embarazadas, taquicardia, asistolia, aspiración pulmonar, neumotórax, anafilaxia, edema pulmonar, hemorragia masiva, hipertensión, hipotensión, broncoespasmo e infartos. La finalidad del Manual de Crisis en Anestesia y Pacientes Críticos publicado por el Sistema de Comunicación de Incidentes de Seguridad de Anestesia (Sensar) es prevenir los eventos adversos. Su aplicación abarca tanto los quirófanos del Clínico como los del Marítimo de Torremolinos.

La anestesista y coordinadora de esta nueva estrategia de seguridad en el Clínico, María del Carmen Avellaneda , explicó que "estos manuales describen paso a paso qué hacer ante situaciones de asistencia urgente, con el fin de evitar eventos adversos que se puedan producir por estrés, cansancio, complejidad e intervención de múltiples participantes". Por su parte, la coordinadora de enfermería de la unidad, Cristina Narbona, añadió que "desde hace ya varios años se trabaja desde la unidad en la mejora continua de la seguridad del paciente, implantando estrategias en esta área especializada, para solucionar cualquiera de las situaciones de urgencia vital que pueden presentarse a diario, de la forma más eficaz y eficiente posible". La Unidad de Anestesia y Reanimación del Clínico hizo el año pasado unas 19.600 intervenciones.