El 24,6% de la población malagueña será mayor de 65 años en el año 2031. Serán casi siete puntos porcentuales más que en la actualidad según datos del Instituto Nacional de Estadística. Ante esta nueva situación demográfica, el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Andalucía recuerda la importancia del ejercicio terapéutico para minimizar los efectos del envejecimiento en este segmento de la población.

Con el fin de dotar a los profesionales de los conocimientos y la práctica necesaria para tratar a este grupo de población, la entidad colegial organizó un curso impartido por los fisioterapeutas Miguel López e Inmaculada Arboleda. López señala que "la tercera edad es un período de la vida muy heterogéneo, con personas con un buen nivel de actividad mientras otras personas sufren limitaciones y dependencia". Por su parte, Arboleda concreta que "la evidencia actual señala que la mala condición física como el estilo de vida poco saludable, determinados hábitos tóxicos o el sedentarismo son culpables de limitaciones físicas importantes".

Según la OMS, los factores de riesgo asociados a mortalidad principalmente son -por orden- hipertensión, tabaquismo, diabetes, inactividad física, sobrepeso, obesidad y colesterol. Factores que, según recuerdan los fisioterapeutas, generan discapacidad, fragilidad, dependencia, o incluso muerte, pero son modificables con la prevención adecuada. Por ello, destaca López, que "incluso en personas mayores con cierto deterioro o fragilidad se puede realizar prevención y tratamiento para reducir la discapacidad y mejorar la calidad de vida".

Arboleda expone algunos ejemplos. "El ejercicio físico, tanto aeróbico como entrenamiento de fuerza, ha demostrado ser eficaz también en personas mayores frágiles o con limitaciones y en prevención de caídas y otros eventos adversos. Y lo que mucha gente desconoce, la fisioterapia tiene mucho que aportar a un paciente con demencia, ya sea alzheimer o de otro tipo". Los profesionales destacan que la fisioterapia además de mejorar la fuerza muscular, el equilibrio y la capacidad de deambulación, retrasa la pérdida de capacidades de estos pacientes, frena su deterioro cognitivo y reduce la agitación. "En pocas palabras, la fisioterapia en las personas mayores es sinónimo de calidad de vida", resume la fisioterapeuta

El Colegio destaca que los programas de ejercicio terapéutico constituyen las intervenciones más eficaces para retrasar la discapacidad y otros eventos adversos. Además, sus efectos son potencialmente similares a los que puedan producir los medicamentos, o incluso más, sin apenas efectos adversos para la prevención de la enfermedad cardiovascular, la diabetes o la obesidad, así como para la reducción del riesgo de mortalidad. La institución profesionales hace hincapié además en que la fisioterapia preventiva en las personas mayores se hace fundamental para evitar o retrasar trastornos del movimiento. "Los programas de ejercicios han demostrado ser la fórmula más óptima para mejorar la condición física de las personas mayores, así como para prevenir y frenar el declive que provoca la edad", señala el presidente del Colegio de Fisioterapeutas de Andalucía, Juan Manuel Nieblas. Con este objetivo, desde el Colegio se está impulsando la formación de los profesionales sanitarios en estrategias de prevención y concienciación de este sector de la población.