Sabor a Málaga, la marca creada por la Diputación para la promoción de la imagen y calidad de los productos agroalimentarios malagueños, apuesta por el sector oleícola y amplía su familia de almazaras con la adhesión de la empresa Garo Aceituna Verde de Campillos, que ayer recibió el distintivo de la marca de manos del diputado de Desarrollo Económico y Productivo, Jacobo Florido.

Casi 800 empresas de la provincia cuentan ya con el sello Sabor a Málaga. Entre ellas hay productores, pequeños comercios, grandes superficies, mercados de abastos, lonjas, establecimientos de hostelería y restauración y empresas distribuidoras; y cerca de 40 de estas empresas se dedican al aceite de oliva, un sector que se sitúa a la cabeza de la exportación agroalimentaria malagueña y que ocupa en la actualidad más de 133.000 hectáreas de olivar, destacaron desde la Diputación Provincial en un comunicado. Situada en una de las zonas olivareras por excelencia de la provincia, la empresa Garo Aceituna Verde nació en 2007 con el legado de una familia dedicada a la aceituna y al aceite desde hace más de 35 años. A nivel de innovación, la empresa ha apostado por mejorar de forma continua tanto los procesos de cultivo como los de recogida y elaboración, y cuenta con avanzadas instalaciones para realizar el proceso de elaboración del aceite mediante primera extracción en frío para preservar su calidad y sabor.