Paradores de España cumple 90 años desde que en 1928 el rey Alfonso XIII mandara construir el Parador de Gredos para que pudieran pernoctar los que iban a cazar a la sierra de Ávila y todos los establecimientos de la red, entre los que se encuentran varios en la provincia de Málaga, están organizando una serie de jornadas de puertas abiertas y otros actos conmemorativos. El Parador de Golf de Málaga se sumó ayer a esta iniciativa y su directora, Marian Montero, recordó la singular historia de este establecimiento turístico malagueño. Señaló que acaban de encontrar en sus archivos documentos inéditos como un plano dibujado a mano de los años 40 del pasado siglo en el que se expone cómo iba a ser la reforma de los bunkers de los nueve hoyos existentes hasta ese momento. "Lo hemos encontrado en un almacén y son unos planos que no se habían visto antes. Están hechos a mano y pintados en acuarela", dijo Montero.

Paradores de España, para celebrar su 90 cumpleaños, inaugurará este lunes una exposición en Madrid con documentos históricos y otros hechos llamativos de todos sus centros del país. El Parador de Golf enviará esos planos inéditos para que puedan ser consultados por los visitantes y, cuando termine la exposición, serán restaurados para poder ubicarlos en el Parador de Golf de una forma destacada. Pero no será el único material que se llevará a Madrid. También se podrá ver el primer libro de reclamaciones del Parador de Golf, que data de 1956 y que tiene el escudo de Franco. "Curiosamente las reclamaciones eran las mismas que las actuales, aunque en esa época eran más sugerencias que reclamaciones propiamente dichas. Había una, por ejemplo, que decía que había clientes que no habían guardado la compostura al acceder en pantalón corto al desayuno", leyó Montero a los asistentes a la jornada de puertas abiertas.

Junto a ese libro de reclamaciones, en la exposición madrileña se podrá ver además el primer libro de visitas del campo de golf, cuya primera firma corresponde al caudillo Francisco Franco el 30 de abril de 1956 y en el que también aparece la firma de Juan Carlos I cuando era Príncipe. Hay un libro de registros de los jugadores del campo de golf cuya primera anotación es de 1939, recién finalizada la Guerra Civil, y que, como indicó la directora de este parador, "solía ser gente británica de alta sociedad porque este parador tiene el campo de golf más antiguo de Andalucía y en esa fecha los españoles no jugaban al golf". Otro de los documentos históricos que ven la luz es una nómina de junio de 1949 en la que se aprecia que el entonces administrador del Parador cobraba 1.000 pesetas, mientras que el jefe de cocina percibía 788 pesetas, el mecánico 600 pesetas y el resto de la plantilla, formada principalmente por camareros y ayudantes de cocina, estaban en torno a las 360 pesetas. Las limpiadoras, las kelly de la época, eran las que menos cobraban con 260 pesetas mensuales. En total, el sueldo mensual de los 27 trabajadores del Parador, sin contar con impuestos y cargas sociales, era de 8.317,54 pesetas.

El Parador de Golf de Málaga tiene su origen en los años 20 cuando la princesa británica Beatriz de Battenberg, madre de la reina Victoria Eugenia, pasaba aquí los inviernos por prescripción médica y, para que se entretuviera y para fomentar el turismo británico, se ordenó la construcción de un campo de golf cuya primera piedra fue colocada en 1929 y que fue destruido durante la Guerra Civil. Tras el conflicto bélico, se decidió ampliar el campo a 18 hoyos. En estos momentos, según explica Marian Montero, tienen una ocupación media en abril del 70% -ayer y hoy están al 99%- y espera un aumento de reservas en cuanto se estabilice el tiempo, porque con tanta lluvia se ha resentido. La temporada alta de golf es en invierno, por lo que captan muchos jugadores del norte de Europa cuyos campos están congelados. En verano el principal turista es español y durante todo el año organizan numerosos congresos y reuniones empresariales. En invierno su principal competencia es Málaga capital y en verano Torremolinos.