Vivir

que suenan para unir a un instituto

  • La orquesta del IES Guadalmedina recibió ayer el premio Gonzalo Martín Tenllado

  • El director de la Filarmónica de Málaga visitó el centro, escuchó y felicitó el trabajo de los alumnos

Entre ellas hablan en árabe, con el resto de compañeros en español y en casa, mitad y mitad. Pero en clase de música Soraya, Salma y Chaima se entienden, simplemente, con las notas de sus flautas dulces. Tienen entre 13 y 14 años y forman parte de la orquesta del instituto Guadalmedina que la profesora Rocío Cuenca fundó nada más llegar a este centro del distrito Palma-Palmilla. La música entendida como lenguaje universal, como compromiso y esfuerzo, como reto de superación es la que suena desde hace cinco años en el instituto, la que propone un taller en los recreos y la que empezó con cinco o seis alumnos para enganchar ya a más de 40. El proyecto recibió ayer el premio Gonzalo Martín Tenllado que otorga la Asociación Amigos de la Orquesta Filarmónica por su 25 aniversario. El director de la OFM, Manuel Hernández Silva, fue invitado de honor al concierto que con tanto mimo preparó toda la comunidad educativa.

"Vosotros sois capaces de todo, de las mejores cosas, sigan trabajando así", les recomendó el director de la orquesta, al que rindieron homenaje con el Burrito Sabanero, "un villancico de Caracas, menudo regalo me habéis hecho esta mañana", reconoció el maestro. Y tocó con ellos el bongo y se arrancó por fandangos en una pequeña charla magistral. Los jóvenes músicos de la orquesta le devolvieron miradas de admiración por esa cercanía que les llenó de orgullo. "La música vive, el arte es universal y libre", dijo Hernández Silva, que los invitó a acercarse y conocer a la Orquesta. "Mira que un día lo ficho para tocar un mambo con la Filarmónica", le dijo a Gabriel Flores, que tocó el cajón a su lado.

Gabriel viene de una familia de músicos profesionales. Su padre, sus hermanos son percusionistas y su madre bailaora. El ritmo lo lleva en la sangre. Cuando este curso entró en el instituto, su maestra lo pilló junto a su compañero Juan Santiago tocando en una mesa y los fichó para la orquesta. "Siempre he impartido una asignatura práctica, una materia viva, la música hay que hacerla sonar para que sea atractiva para los alumnos, adaptada también a sus gustos", explicó ayer Rocío Cuenca, profesora de Música en el IES Guadalmedina y directora de la orquesta del centro. Esta docente ya estuvo en un centro similar en la provincia de Sevilla y sabía que tenía que pensar en estrategias diferentes si quería motivar a su alumnado.

"Empecé por enseñarles fotos y conciertos de otros institutos para que vieran que aquí también era posible construir algo similar", comentaba ayer tras el acto. Gota a gota, tras un "trabajo de insistencia", fue cundiendo el ejemplo de los precursores y ahora la formación es un referente en el centro. Y no sólo entre los muros del Guadalmedina. También hacen una pequeña gira por los colegios de Palma-Palmilla. "De esta forma se favorece el tránsito a la Secundaria, ven lo que están haciendo sus compañeros, se motivan", agregó la docente.

La flauta dulce, por ser el instrumento más asequible, es predominante en la formación. También les acompaña una guitarra, un piano y la percusión. El galardón otorgado ayer les ha supuesto 750 euros en material musical para el centro. "Con motivo del 25 aniversario de la OFM se creó un concurso de actividad didáctica en la asignatura de música para centros de Secundaria y se tuvo claro el ganador por unanimidad", confesó Ana Torralba, presidenta de la Asociación Amigos de la Filarmónica y conductora del acto que reunió también a las delegadas territoriales de Cultura y Educación y a la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Málaga.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios