Javi Gracia aún anda asimilando la lesión de Nordin Amrabat con su selección. En torno a un mes estará fuera de combate el holandés, lo cual supone una dura pérdida en el peculiar ecosistema ofensivo que había montado con él y los tres malagueños en las últimas jornadas. Un palo que no queda más remedio que asumir. Sin que sirva de compensación, en el horizonte asoman las puestas a punto de Sergio Sánchez y Antunes. Ambos se ejercitaron ayer con el grupo y, en función de la evolución que vayan mostrando a lo largo de la semana, se verá si están para retornar en el Vicente Calderón o si se les reserva para la visita del Madrid a La Rosaleda.

Ambos fueron uno más en la sesión dispuesta por el entrenador navarro, sin duda una gran noticia porque todavía tendrán cinco días por delante para ponerse a tono y estar aptos. Comoquiera que tampoco ha transcurrido mucho tiempo desde sus respectivas dolencias (unas dos semanas), tampoco han perdido masa muscular ni ritmo como para asegurar que les cueste mucho ponerse al nivel de los compañeros.

Las buenas noticias prosiguieron con Rosales, quien completó la primera parte del trabajo a buen nivel. La precaución que se está siguiendo con él y que le impidió tanto jugar frente al Eibar como viajar con su selección va por buen camino y también podría derivar en su alta médica. En cuanto a Samu Castillejo, quien no viajó con la sub 21 por encontrarse con un cuadro de amigdalitis, igualmente fue uno más. Ahora mismo sólo están lejos de reaparecer los lesionados de larga duración Chen y Flavio; Tissone, por su parte, sigue evolucionando lentamente de la rotura fibrilar que complicó la fase final en la recuperación de su rotura de ligamentos.