No es el último cartucho, pero como si lo fuera. La necesidad acucia al Unicaja, que si hoy pierde ante el Fenerbahce tendría extremadamente complicado pasar al Top 8. No se le puede exigir al equipo de Joan Plaza que esté en esa instancia porque hay equipos con mayor potencial y presupuesto. Pero sí que lo compita, como lo hiciera el año pasado. Sería un paso atrás en Europa no hacerlo. Pero el asunto no es fácil. Llega por Málaga el Fenerbahce del señor de la Euroliga, Zeljko Obradovic, ocho Euroligas le contemplan. Ha cuadrado mejor al equipo este año, hay un esqueleto de la temporada pasada que se conserva, pero tampoco está al nivel de los gigantes. Olympiacos y CSKA ganaron en los dos primeros partidos en casa del Top 16.

Lo reseñó Plaza en la previa del partido y lo ratifican los jugadores a los que se pregunta. El equipo ha entrenado muy bien esta semana, al completo además, con Markovic y Stefansson, los tocados. Es una buena señal. "Desde noviembre no podíamos trabajar así", decía Plaza. El calendario concede una tregua en cuestiones de viajes y el equipo enlazará dos semanas y media sin desplazamientos, lo que a estas alturas de campaña se agradece una barbaridad. No merece el Unicaja, tan grande en la ACB, descolgarse de la Euroliga tan pronto. Plaza sólo se reprocha la derrota ante Milán como error. Lo otro, perder en Estambul y Moscú y ante el Olympiacos en casa, es asumible. Pero ya toca ganar en casa porque la Euroliga la demanda. Aunque ayer se conocía que Jordi Bertomeu, factótum de la competición, modifica su idea de que hacer divisiones entre Euroliga y Eurocup, con descensos y ascensos. Hay que trabajar el modelo, pero hay que estar ahí de manera irrenunciable.

El Fenerbahce es uno de los presupuestos más altos de la competición. Capaz de alinear un quinteto con cinco jugadores por encima de los dos metros, tiene mucho potencial ofensivo. Lo ha añadido a lo que ya tenía. Bogdanovic, Vesely y, sobre todo, el mejor anotador de la competición después de Taylor Rochestie, Andrew Goudelock. Recientemente se contrató a Nikos Zisis por la carencia de un base. Un refuerzo de lujo. El griego quedó eliminado con el Unics de Kazán y se reenganchó a la competición con un fichaje ventajoso.

"Jugamos contra el Unicaja, un equipo que marcha líder de la Liga ACB y debemos pensar sobre ello. Son muy buen equipo aunque no hayan ganado ningún partido del Top 16. Juegan bien y debemos prepararnos para un partido durísimo", analizaba Obradovic el partido. Con él llega un viejo conocido de la afición malagueña, Luka Zoric. Se espera que el Carpena presenta un buen aspecto aunque el ritmo de venta de entradas no está próximo al lleno. Es una oportunidad, quizá la última de que meterse en el Top 8 no sea una quimera.