La temporada ha dejado varias noticias bastante negras en forma de lesiones desgraciadas. Flavio, Chen y Rafa de Vicente fueron las víctimas, ahora ya recuperados y en la recta final en busca de ritmo competitivo para volver a ser uno más. Fernando Tissone lo sufrió en sus carnes a finales de la pasada campaña y en gran parte de ésta. Fue el primero en tener el alta e incorporarse a la dinámica de grupo. Incluso ha jugado ya, aunque con participación testimonial. Ahora alumbra el tramo final liguero con opciones de tener más oportunidades.

Dos motivos le hacen soñar con ello. Por un lado, la lesión de Camacho, que dejará un hueco vacante en el puesto donde él se desempeña. Por otro, las buenas sensaciones física que tiene. "Son muy buenas, estoy muy contento por cómo me está respondiendo la pierna. No siento ningún dolor, ninguna molestia y cada vez me estoy sintiendo más a gusto con el ritmo de juego. Puede que tenga más opciones de jugar ahora, pero eso está en mí y en el míster, que él me vea para jugar", apostilló el ítalo-argentino, que tuvo buenas palabras para su compañero maño: "Hablé con él este fin de semana, está tranquilo y seguro que lo va a sacar adelante. Es una persona con mucho corazón, con muchas granas y esta lesión no va a ser algo que le marque".

Tissone remarcó el objetivo europeo y cree que aún es posible por vía directa. "El equipo está bien, el último resultado no fue positivo, aunque el equipo tiene muchas ganas, mucha ambición y no va a dar ningún partido por perdido. Intentaremos hasta el final lograr el mayor número de puntos posibles y seguir soñando con Europa", relató el mediocampista en el colegio Paulo Freire, donde en esta ocasión fue el protagonista de la campaña Valores Blanquiazules que desempeñan la Fundación Málaga CF y la Obra Social La Caixa.