Joan Plaza, con la voz bastante tomada, reconoció en la sala de prensa del Barclaycard Center que el Unicaja está muy justo físicamente y que ello le da más al valor al triunfo, que permite mantener una semana más el liderato.

"Hemos ganado sufriendo, con un nivel de cansancio acumulado muy grande. Por la mañana estábamos al límite en el entrenamiento, hemos aguantado y hemos sacado adelante el partido. El Movistar es un equipo que ha demostrado con todos los rivales que son duros en su cancha, que meten muchos puntos aquí, 12 más que a domicilio, muy verticales. Sabíamos que teníamos que esperar nuestro momento, hemos subido un pistón defensivo en los momentos importantes. Van Lacke es letal contra nosotros, veníamos con mucho respeto", analizaba el técnico barcelonés, que admitía que "la victoria ante el Baskonia nos dejó las reservas de energía muy escasas, hacía tiempo que no nos pasaba. No sólo a los lesionados, que no haremos bandera de ello, sino que los sanos estaban al límite y les propuse un pacto: cambiarlos cada cuatro o cinco minutos. Costaba porque el rival venía muy bien. Teníamos miedo y respeto hasta la última jugada. Llevamos muchas semanas siendo líderes porque hemos sabido esperar el momento. Siete puntos de hueco son excesivos visto lo visto. Dos o tres puntos para cualquiera de los dos hubiera sido lo normal. El Estudiantes peleará por acercarse al play off. Queremos llegar al partido del Madrid como líderes".

Cuestionado por si ese partido ante el Real puede ser la clave para quedar líderes de la temporada regular, Plaza dijo que "creo que no, pero por nuestra culpa. Aún no tenemos las hechuras para venir a la pista del Estudiantes y ganar con comodidad. Es cierto que los que tienen hechuras no han ganado aquí, pero nosotros podemos ir a Manresa y perder. En Fuenlabrada pudimos perder también. Estamos madurando, pero no lo suficiente para pensar que si ganamos en Sevilla y al Madrid ganamos el resto. Lo que queda es el CAI, el Barça, Río Natura... La mentalidad es merecernos estar donde estemos".

El técnico cajista explicó por qué pidió un tiempo muerto a cuatro segundos del final con cuatro puntos de ventaja: "Perdimos en Barcelona por un tiro de Abrines desde el centro del campo. Somos un equipo bueno, pero no lo suficientemente maduro para decir: 'este balón lo ponemos allí y no lo perdemos'y por eso pedí el tiempo muerto a cuatro segundos del final. Quería meter el balón a Toolson para los tiros libres. No quiero lucir nada. Stenfansson, que tiene el culo pelado, en la jugada anterior tira faltando 11 segundos de posesión. Aún no podemos gobernar nuestras posesiones. Insistí en que nunca podíamos perder el balón horizontalmente, siempre hacia línea de fondo. Tengo demasiado respeto a esta casa para pedir un tiempo muerto por fastidiar".

"Venimos sin Kostas Vasileiadis, que debe ser determinante, sin un jugador tan importante como Carlos Suárez, con Kenan Karahodzic, que el año pasado apenas jugaba en el LEB. Somos los que somos. Con esa inercia queremos llegar hasta donde la vida nos lleve. Ojalá que al primer puesto. Pero quedar primeros tampoco sería garantía de nada. Hay que tener los pies en el suelo, pero sin dejar de disfrutar", recordaba Plaza, que reconocía que "nos ha costado mucho defender a Aradori [autor de 23 puntos]. Hemos ido rotando defensor para estar poco tiempo con él pero intentar desgastarlo. A pesar de ello ha tirado y metido mucho. No dejarle hacer tiros cómodos. No puedes impedirle tirar, sino reducir la calidad. Es capaz de meterse también hasta la cocina".

Por último, cuando se le inquirió por los 13 días sin encuentros que vienen ahora, Plaza dijo que "hay veces que viene mal un parón. Viene bien para los lesionados, pero igual se pierde el ritmo de la competición, tenemos que tener cuidado con eso porque jugamos cada tres o cuatro días", remató.