Deportes

Borja, entre la fuerza y la técnica

  • El lanzador malagueño intenta superar sus molestias en el psoas, que le obligan a lanzar de forma diferente Se infiltró en el piramidal el lunes para defender su título de campeón

Desde 2010, de manera ininterrumpida, el campeón de España de lanzamiento de peso tiene nombre malagueño Borja Vivas. Desde que cogiera el relevo de Supermán Martínez, el dominio que ejerce Vivas nunca había tan discutido como en el concurso que se disputará mañana en Castellón. Concurren dos circunstancias, unos problemas físicos que propician que el mejor tiro de Borja al aire libre esta temporada haya sido de 20.23 metros y la subida de nivel en el peso español, con Carlos Tobalina (20.13) y Yosier Toledo (20.12) bordeando la psicológica frontera.

El malagueño se infiltró el pasado lunes en el músculo piramidal, en el glúteo, para aliviar sus molestias en el psoas que le han tenido en los últimos meses lejos de sus mejores marcas. Los test de fuerza que realiza avisan de que está en los mismos indicadores que la pasada temporada, justo cuando en estas mismas fechas lanzó 21 metros en Alcobendas antes conseguir el subcampeonato de Europa en Zúrich. Pero falla la técnica.

Una de las principales virtudes de Borja es su altura, 2.03 metros, que permite lanzar la bola a una gran altura y retardar su caída. El tiro combina fuerza y técnica, pero, como él explica, ahora mantiene lo primero pero le falta lo segundo. "Es un pinchazo a la altura de la cadera. El latigazo te hace cambiar rutinas simples como montarte en el coche y también en la manera de lanzar. Sigo tirando en torno a 20 metros a base de fuerza porque estoy bien ahí, pero ahora falla la técnica", explica el de Carranque: "La técnica igual no es el metro de diferencia, pero por lo menos medio metro sí, seguro. Es el plus. Ahora lanzo encogido, como si yo midiera menos y no proyecto la misma parábola. Influye también que le das vueltas al coco, nunca he estado lesionado y hace que no gestione bien la situación. Igual debería haber parado dos semanas de reposo absoluto y se hubiera sanado la sobrecarga, pero ya hay poco que hacer... La infiltración era el último recurso, la última vía que nos quedaba. Y desde el lunes no tengo dolor. Voy con muchas ganas". Las dobles sesiones de fisioterapia aliviaban algo el dolor, pero las sesiones de técnica provocaban que "casi ni durmiera, cualquier movimiento hacía que viera las estrellas".

El concurso se celebrará mañana a las 20:45 horas. Y la buena competencia que existe estimula a Borja. "Otros años se podía ganar con 19 metros y poco. Ahora eso no va a pasar, hay que ganar en torno a 20. Tiene la parte buena de que la especialidad crece y eso para todos es excelente. Perder es una posibilidad y también hay estrategias, enganchar pronto un buen tiro daría confianza y a los demás los hace dudar. En otra situación igual me hubiera planteado otra cosa, pero no quiero faltar", asevera Borja, que se desplaza hoy a Castellón, vía AVE a Valencia, junto a su entrenador, Tomás Fernández.

La idea del malagueño era conseguir ya en este verano la marca mínima para los Juegos Olímpicos de Río, fijada en los 20.50 metros, para preparar mejor la siguiente temporada, pero ahora está complicada. La lesión también ha impedido a Borja participar en pruebas de postín de la Diamond League, que estaban en su agenda. Y hará, salvo cambio de planes, que la siguiente competición tras el Campeonato de España de Castellón sea directamente el Mundial de Pekín.

En su plena madurez como lanzador, con 31 años, Vivas quiere extender el reinado del peso algunos años más. Es uno de los campeones españoles que mejor racha tienen en la actualidad y quiere defender la corona como sea. Aunque sea a base de fuerza y sin técnica.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios