Valdo, Iván y Munúa volvieron ayer a Málaga en un vuelo directo procedente desde Bilbao. Durante gran parte de los 80 minutos en que se cubre el trayecto, intercambiaban cábalas acerca de los resultados que convienen en las próximas jornadas. Atendiendo a los partidos de todos los equipos que matemáticamente tienen aún opciones de descender, se dibujan unos 19.000 escenarios posibles, pura locura en sólo una semana. Más concretas son las cábalas sólo para mañana, fecha unificada del penúltimo compromiso. Las calculadoras defienden lo blanquiazul: si el Málaga vence en Getafe y el Tenerife no puntúa ante el Almería, ya no tendrá que hacer más cuentas, seguirá seguro en Primera.

Trasladado a los números, supone que en seis de los 27 casos que pueden darse esta jornada en los partidos de Valladolid, Málaga, Tenerife y Racing (el Xerez necesita ganar sus dos encuentros y, además, una carambola compleja), el conjunto blanquiazul estaría matemáticamente tranquilo. Muy mal se tienen que dar las cosas para que la jornada sea nefasta, puesto que en 17 de las restantes combinaciones el equipo llegaría al partido final fuera del descenso y, por tanto, dependiendo de sí mismo para rematar la faena. Sólo en cuatro escenarios los de Muñiz caerían a la terna de conjuntos que perderían la categoría (en todos ellos el Tenerife tendría que derrotar al Almería).

Si el Málaga puntúa en el Coliseum Alfonso Pérez, no tendría que estar atento a las incidencias del duelo fratricida entre Valladolid y Racing, puesto que dependería de sí mismo independientemente de lo que allí pasase. No obstante, en la plantilla prefieren que sea el equipo de Clemente el que se alce con la victoria, ya que en la última jornada tendrán que ir a jugársela al Camp Nou, casi con toda probabilidad con los azulgrana obligados a ganar para ser campeones de Liga. El Tenerife, por contra, jugará ante rivales sin objetivos en liza, pues sólo una extrañísima carambola llevaría al Almería al descenso, mientras que el Valencia, con el que cerrará la Liga, ya es matemáticamente tercero.

De las 27 combinaciones que pueden darse, la peor con diferencia pasaría por la derrota blanquiazul en Getafe, la victoria del Tenerife al Almería y el triunfo de los cántabros en Pucela. Si se diesen esos marcadores, el equipo de Muñiz se quedaría antepenúltimo, a dos puntos de distancia del Tenerife y a tres del Racing.

Tal y como se veía venir en las últimas jornadas, el gol average se convertirá en una cuestión vital para dilucidar las últimas plazas. De manera individual el Málaga es el que está más tranquilo, puesto que se los gana a sus rivales directos (al Racing gracias al particular, a los demás merced al coeficiente general de goles). Otra cuestión distinta sería el empate múltiple, que habría que estudiar según los resultados. Lo único claro es que en caso de que afectara a los cuatro, el Málaga se salvaría de la quema, puesto que sería segundo detrás de Valladolid (que contaría con ocho puntos en los choques directos), es decir, justo al límite de la salvación. Siempre saldría victorioso del empate con Tenerife y Valladolid, mientras que la igualada con Racing y Valladolid únicamente le valdría si los isleños no suman más puntos que ellos, y el empate con Racing y Tenerife sólo les salvaría si el Valladolid no acabase con más tantos en la tabla. De locos.

De hecho, puede darse un caso muy explícito en el que incluso la victoria en Getafe privaría al Málaga de cantar la salvación matemática. Para ello, tendrían que ganar Tenerife y Valladolid. De ese modo, los blanquiazules ocuparían el 16º puesto con 39 puntos, el Tenerife estaría por debajo con uno menos, y tanto Valladolid como Racing, con 36, estarían en descenso. Si en la jornada final el Málaga perdiese y sus tres contrincantes lograran el triunfo, el Tenerife pasaría a ser el 16º, y el triple empate con los otros dos dejaría a los malaguistas antepenúltimos y en Segunda.

Analizando todos los resultados, sólo los 41 puntos darían la salvación matemática al Málaga, que no obstante sólo podría lograr 40  ó 42, nunca lo intermedio. Sin embargo, hasta quedándose con los 36 actuales podría salvarse. Que nadie olvide mañana la calculadora.