El periódico The Sunday Times acusó a dos miembros del comité ejecutivo de la FIFA de estar dispuestos a vender su voto para la elección del organizador del Mundial de fútbol de 2018 y 2022.

Según el artículo, dos reporteros del periódico hablaron con dos miembros del ejecutivo del órgano rector del fútbol haciéndose pasar por empresarios estadounidenses que querían obtener el Mundial de 2022 para su país. Los dos dirigentes futbolísticos se mostraron receptivos a recibir dinero por parte de los supuestos hombres de negocios.

El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, informó a los miembros del comité ejecutivo en una carta sobre la "muy fea situación" y anunció una "investigación exhaustiva". "Si invierten dinero, eso significa naturalmente que también quieren el voto", dijo un funcionario futbolístico africano en una reunión con un periodista camuflado, según The Sunday Times, que asegura tener filmaciones de la conversación.

El representante de la FIFA dijo a los falsos empresarios que una donación de 800.000 dólares realizada directamente a él para construir en su país campos de fútbol influiría en la dirección de su voto. El segundo, siempre según el rotativo, pidió tres millones de dólares neozelandeses (2,3 millones de dólares) para el equipamiento de una academia deportiva.

La federación internacional con sede en Zúrich dará a conocer el 2 de diciembre qué países albergarán el Mundial de fútbol en 2018 y 2022. La decisión la toma el comité ejecutivo, un órgano de 24 miembros. Estados Unidos renunció el viernes a su candidatura para 2018 y se concentró únicamente en la pelea por 2022. En consecuencia, Inglaterra retiró también su solicitud para 2022 para centrarse exclusivamente en 2018.

De acuerdo a las costumbres de la FIFA, el torneo de dentro de ocho años se celebrará seguramente en un país europeo. Además de Inglaterra, también Rusia, España/Portugal y Bélgica/Holanda aspiran a su organización. Para 2022, la pugna se libra entre países de fuera del Viejo Continente: Estados Unidos, Qatar, Corea del Sur, Japón y Australia.

El organismo rector del fútbol mundial anunció una investigación de los presuntos hechos de corrupción. "La FIFA ya ha solicitado toda la información y documentos relacionados con este asunto, y está a la espera de recibir el material", asegura en una comunicación escrita. "La FIFA analizará inmediatamente el material disponible y sólo cuando este análisis haya concluido, la FIFA podrá decidir cualquier eventual paso futuro". Mientras tanto, no hará ningún otro comentario.

El artículo 62 del código disciplinario del organismo advierte de que quienes intenten sobornar a miembros de la FIFA, jugadores o árbitros serán sancionados con multas económicas, inhabilitación para ejercer cualquier actividad en el fútbol y prohibición de acceder a un estadio. "La corrupción pasiva (solicitar, hacerse prometer o aceptar aquella clase de dádivas o beneficios) -agrega el texto-, conllevará idénticas sanciones".