Con los únicos votos favorables del equipo de gobierno del PP, la Comisión Gestora de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental, que integra a 11 localidades, aprobó ayer de forma definitiva la modificación estatutaria por el que la población determinará el número de representantes de cada localidad en el citado organismo. Se garantiza de esta forma el principio de "un ciudadano, un voto", según la presidenta, Margarita del Cid, de tal forma que "el voto de todos los ciudadanos de la comarca valga lo mismo".

Para del Cid se acaba así con la distorsión que hacía que el voto de los municipios pequeños valiese en ocasiones hasta 100 veces más que el voto de los vecinos de los municipios grandes.

Con esta modificación, los municipios estarán representados con un miembro por cada 25.000 habitantes, si bien aquellos que tengan menos de esta cifra tendrán dos representantes como es el caso de Manilva, Casares, Benahavís, Ojén e Istán, mientras que ciudades como Marbella y Estepona elevarán su representación dependiendo del volumen poblacional.

Este cambio no cuenta con informe favorable del secretario de la institución que indica que éste debe ser aprobado por los plenos de todos los ayuntamientos mancomunados, frente a lo recogido en el artículo 47 de la Ley de Bases de Régimen Local, que atribuye la competencia de esta aprobación a la Comisión Gestora de la Mancomunidad, según el portavoz del PP, Félix Romero, que indica que sí cuenta con informes, del interventor de la Mancomunidad y el de la asesoría jurídica de la Diputación, aunque no son vinculantes.

Desde la oposición señalaron que se pasa de "una mancomunidad de municipios a una mancomunidad de partidos", donde el PP, que gobierna en las grandes ciudades de la Costa del Sol, "va a estar más representado que los propios ayuntamientos" al fijar la representación dependiendo del número de habitantes de cada localidad, según el portavoz de IU y alcalde de Istán, José Miguel Marín.

Para el representante del PSOE y alcalde de Ojén, José Antonio Gómez, "se dinamita el principio de solidaridad que debería regir este organismo" y además se hace, según coincidieron ambos dirigentes, con el informe en contra del secretario del citado ente que señala que esta reforma debe ser aprobada por los plenos de todos los ayuntamientos mancomunados, aunque desde el PP aseguran que el artículo 47 de la Ley de Bases de Régimen Local atribuye la competencia de esta aprobación a la Comisión Gestora.

El portavoz de Política Institucional del PSOE Andaluz, Francisco Conejo, lamentó que todo este proceso se haya realizado sin consenso. "Se trata de solidaridad y de convivir, no de convertir la Mancomunidad en un espacio de confrontación", según Conejo, que anunció el envío de una carta al presidente provincial del PP, Elías Bendodo, para mantener un encuentro con el fin de alcanzar el consenso necesario para hacer un cambio de este tipo". Por ello, tanto PSOE como IU anunciaron que llevarán este tema a los tribunales al ser contrario a ley.

Desde el Partido Popular, el parlamentario José Eduardo Díaz criticó la actitud de obstruccionismo del PSOE a "la voluntad democrática de los vecinos de la Costa del Sol" y criticó que los socialistas se posicionen a favor del estancamiento, "de seguir permitiendo que una normativa franquista rija el funcionamiento de la Mancomunidad". Díaz cuestionó que Conejo "se preocupe ahora por esta comarca y no lo hiciera cuando José Bernal, el secretario general del PSOE de Marbella, dejara un agujero de 30 millones en Acosol" siendo consejero delegado del organismo.

Por otro lado, la Comisión Gestora aprobó el denominado Plan de Inversiones Mancomunado (PIM) por el que fruto de la colaboración de esta institución con la Secretaría de Estado de Turismo y la Diputación de Málaga se están ejecutando inversiones en los 11 ayuntamientos por un valor total de 1.150.000 euros.