Málaga se tiñó ayer de morado para denunciar, en distintos actos y manifestaciones promovidos por asociaciones y plataformas de mujeres, que la violencia de género mata y recalcar la importancia de que no se baje la guardia frente a ella con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Así, la ciudad recordó a todas las mujeres que han sido víctimas de esta lacra, especialmente a las tres que durante este año han perdido la vida en la provincia a manos de sus parejas o ex parejas. Fue el caso de Ana González, en Torremolinos; Verónica Frías, en la capital, y Ana María Márquez, en Torrox.

Uno de los actos celebrados ayer tuvo como protagonista el monolito que en el Paseo del Parque recuerda a las víctimas de la violencia de género. En él se plantaron tres rosales en homenaje a sendas mujeres y los representantes institucionales incidieron en la necesidad de que esta lucha sea de toda la sociedad. El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, se refirió a la educación como pilar básico para acabar con este problema. Y con ese fin, dijo, las administraciones tienen que ser "proactivas" para, entre otras cuestiones, reforzar los mecanismos de defensa, mientras que también resaltó que toda la sociedad debe implicarse en esta lucha. De igual modo se pronunció el subdelegado del Gobierno en Málaga, Jorge Hernández Mollar, quien indicó que también debe ser una labor en la que estén implicados, además de los ciudadanos, los medios de comunicación y las familias. Asimismo, el Instituto Politécnico Jesús Marín organizó un flashmob, protagonizado por alumnos, con el objetivo de mostrar su repulsa en la céntrica calle Alcazabilla.

También en otros puntos de la provincia se han celebrado actos de homenaje. Así, el Museo de Nerja inauguró ayer la sala denominada Ana María Márquez durante un emotivo tributo al asistió el hermano de la fallecida, Antonio Márquez, y la esposa de éste, y en el que intervino el presidente de la Fundación Cueva de Nerja, Jorge Hernández Mollar, y el coordinador de la comisión asesora de la pinacoteca, Francisco Capilla.

Hernández Mollar añadió que "una sola muerte es un fracaso de nuestra sociedad" y ha recordado también a Ana Isabel y Verónica, asesinadas en Torremolinos y la capital, respectivamente, al tiempo que ha subrayado "la importante labor que desempeñan las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado, las administraciones y los medios de comunicación para prevenir esta lacra social". Así, recalcó como novedad "la puesta en marcha ayer de la nueva Unidad de Familia y Mujer de la Policía Nacional" por parte del Ministerio del Interior.

En Málaga, la manifestación, a la que acudieron cientos de personas, salió de la Plaza de la Merced hacia las 19:30, convocada por la Plataforma Violencia Cero. También integrantes del Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE) elevaron la voz para denunciar la violencia de género "como el grado más extremo de la larga serie de discriminaciones e injusticias que sufren las mujeres en el sistema capitalista", que, a juicio de la formación, está basado "en la violencia como método de apropiación de recursos y cuerpos". "Esta violencia sustentada en la división sexual del trabajo, diferente reparto de roles de género e inferioridad de la mujer en las posiciones de poder está impuesta por el sistema patriarcal aliado natural del capitalismo", señalaron.