Ronda vivió ayer un anticipo de lo que será Ronda Romántica, un evento que espera volver a reunir a miles de visitantes y que tendrá lugar a mediados del mes de mayo. Eso sí, para ir vestido de forma adecuada en esa cita, seis diseñadoras de la comarca rondeña presentaron ayer sus creaciones para este año en un desfile que tuvo como escenario la conocida Carrera Espinel, principal calle peatonal y comercial de la ciudad.

Las 700 sillas que se habían instalado por parte de Turismo de Ronda se quedaron cortas y fueron muchas las personas que se vieron obligadas a seguir de pie el desfile. En el mismo se pudieron ver propuestas para todos los gustos. Diseños de uniformes de soldados españoles, franceses, taberneras, bandoleros, vestidos con toques goyescos o ideas de lo más pomposas para aquellos y aquellas que opten por la clase alta de aquella época. Todo ello encaminado a que todas aquellas personas que están pensando en participar en este evento acudan con ropas de aquel momento de la historia. Y es que uno de los grandes objetivos sigue siendo que la ciudad viaje al pasado por unos días y se recupere la época de los viajeros románticos. Un hecho que se logró durante las dos primeras ediciones de Ronda Romántica, convirtiendo el centro de la ciudad en un desfile continuo de trajes de muy diferentes tipos, a lo que se añaden las recreaciones históricas que realizan diferentes agrupaciones de pueblos de la Serranía de Ronda.

Mientras tanto, el público concentrado ayer en la pasarela de Carrera Espinel no dejó de aplaudir a los diferentes modelos. Y es que estas diseñadoras también han jugado un papel muy destacado para conseguir que sea el mayor número posible de personas los que decidan realizarse un traje, que, en muchos casos, ya queda en el armario para diferentes ocasiones. Por su parte, desde la organización mostraban su satisfacción por la gran afluencia de público y ya se piensa en buscar una ubicación para el próximo año que pueda acoger todavía mucho más público.