Málaga cierra el ecuador de su temporada alta del turismo con 1.026 parados menos. El dato tiene una lectura ambivalente: la provincia lidera la creación de empleo en España, pero el dato es tan insignificante que prácticamente representa un estancamiento del mercado laboral tras la reactivación registrada este año. Los datos que ayer dio a conocer el Ministerio de Empleo y Seguridad Social revelan que agosto no da más de sí. La creación de nuevos puestos de trabajo se concentra justo en la víspera de este mes que constituye el cénit turístico: en julio salieron de las listas del paro 5.898 personas y en junio otras 3.835. Ni las altas tasas de ocupación hotelera que registra agosto ni eventos como la Feria de Málaga tienen capacidad para acelerar la creación de empleo.

En este momento la cifra de desempleados en la provincia se eleva a 174.470 personas, un 0,58% menos que el mes anterior y un 5,5% por debajo del paro que se contabilizó en agosto de 2014. A pesar de esta atonía, Málaga brilla en un panorama nacional marcado por una severa destrucción del empleo. Es, junto a Asturias, la provincia en la que más ha bajado el paro en todo el país durante el mes pasado. Esta circunstancia, por otra parte, se ha convertido en un clásico que se repite desde hace tres años.

La tendencia que muestra el desempleo coincide con la evolución que ha experimentado la Seguridad Social. A 31 de agosto se contabilizaban 546.722 afiliados en la provincia, exactamente 669 más que el mes anterior. No obstante, el cómputo interanual sí muestra un comportamiento significativamente mejor con un aumento de 22.888 personas inscritas.

Del conjunto de afiliados, 105.989 son trabajadores autónomos. Este colectivo ha crecido en 5.675 personas en el último año. Es decir, una de cada cuatro nuevas altas que se ha registrado en las oficinas de la Seguridad Social de Málaga en el último año corresponde a un autónomo.

Por otra parte, el Ministerio de Empleo informó ayer que en julio -último mes disponible- se registraron en Málaga 93.939 beneficiarios de prestaciones por desempleo. Es decir, poco más de la mitad de los parados (53%) cobran el seguro por desempleo o un subsidio. La cuantía media que ingresan es de 732 euros, cantidad que figura entre las más bajas de todo el país.

Las prestaciones por desempleo han sufrido un descenso drástico a lo largo de la crisis económica. Para comprender esta evolución solo hay que recordar por ejemplo que en enero de 2009 se contabilizaban en la provincia 146.123 desempleados, de los que 103.280 percibían prestaciones públicas , es decir el 70%, frente al 53% actual. La cuantía media entonces era de 913 euros mensuales, o sea 181 euros más que ahora. Es decir, las prestaciones medias por desempleo han caído casi un 20% desde 2009. En 2012, el porcentaje de receptores de ayudas por desempleo alcanzaba al 58% de los parados y la prestación media ascendía a 800 euros mensuales.

Desde el punto de vista sectorial, la construcción sigue siendo el sector más retraído. El paro en la agricultura y la industira bajó aunque de forma muy testimonial, con 85 y 32 parados menos respectivamente. El grueso de la caída la ha experimentado el colectivo sin trabajo anterior (803 desempleados menos) y los servicios (759), mientras que la construcción se ha anotado en agosto otros 659 parados hasta alcanzar los 24.402 desempleados en Málaga. Desde el punto de vista del género, el mercado laboral es marcadamente sexista porque las mujeres son las que con diferencia sufren más el paro. Representan 54% de las personas sin trabajo en Málaga.

Finalmente, la temporalidad es la característica más notable del mercado laboral en la provincia. De los 448.196 contratos contabilizados en Málaga, el 93,4% son temporales y únicamente 27.34 son indefinidos. Del total, 48.070 se han firmado en agosto y de ellos solo 2.445 son fijos.