La Comisión de Pleno de Economía del Ayuntamiento de Málaga aprobó ayer, con los votos a favor del PP y Ciudadanos y la abstención del resto de grupos de la oposición, las nuevas ordenanzas fiscales para 2016 y la modificación del Reglamento de Ayudas al IBI, que entrarán en vigor el próximo 1 de enero. Las medidas relacionadas con el IVTM (Instituto de Vehículo de Tracción Mecánica), las licencias de apertura, el bono anual de la EMT, el SARE para vehículos eléctricos y el Parque Zoosanitario Municipal recibieron siete votos a favor y cuatro abstenciones. En el caso del ICIO y las plusvalías, fueron seis votos a favor y cinco abstenciones. En lo que se refiere al punto para la modificación de las ayudas al IBI, la propuesta salió adelante con nueve votos a favor y dos abstenciones.

Todo ello deberá ser nuevamente expuesto ante el Pleno extraordinario a celebrar el 13 de octubre. Estas novedades fiscales supondrán la reducción del impuesto de Plusvalía, la exención o reducción de la tasa de apertura para emprendedores autónomos y empresarios, el aumento de las ayudas al IBI para colectivos desfavorecidos y el incremento de las bonificaciones al ICIO. La suma de las acciones, según el equipo de gobierno del PP, supondrá una rebaja de los ingresos de unos 10 millones de euros, que habrá de ser compensada en los próximos presupuestos municipales. No se descarta que la cifra crezca hasta los 16 millones.

Una de las medidas que salió adelante es la creación de un bono anual en la EMT, con un coste de 290 euros, 189 menos de los que le costaría al usuario. En el caso de la tasa para la apertura de establecimientos, el informe del área municipal constata que la aplicación de bonificaciones provocará un desfase de 802.000 euros entre las previsiones de ingresos y los gastos propios del sistema.