Un mosaico repleto de paraguas, camisetas azules y mucha lluvia. Esa es la estampa que ayer, a primera hora de la mañana, presentaba el Paseo de los Curas, que de acoger en meses pasados a decenas de jóvenes unidos por el botellón pasó a ayer a ser escenario de salida de las más de 5.000 personas que participaron en la cuarta edición de la Carrera de la Mujer (aunque se habían inscrito unas 7.000). La cifra reunió a hombres y mujeres, de todas las edades, por un objetivo conjunto, el apoyo a las mujeres que sufren en carne propia la terrible enfermedad del cáncer y a la recuperación de Haití tras el terremoto que asoló este país de América Latina hace un par de meses.

La presencia masiva tiene aún más significado si se tienen en cuenta las condiciones climatológicas con las que despertó la capital de la Costa del Sol. Porque ayer hubo poco sol y mucha lluvia. Desde los primeros pasos, la carrera, que se extendió sobre los cinco kilómetros que distan desde el Paseo de Curas hasta la playa de La Misericordia, estuvo pasada por agua. Pero esta circunstancia no hizo, a pesar de lo que pudiera pensarse, que los participantes optasen por quedarse en casa. Muy al contrario, la adversidad pareció unirlos más en pos de esta causa.

"Muchos pensaban que se iba a suspender la carrera, pero no ha sido así", sonaba una voz por los altavoces instalados por la organización del evento, que apostillaba: "Si llueve no pasa nada. La carrera nunca se suspende".

Cada uno, parafraseando la afamada canción de Frank Sinatra, hizo la carrera a su manera. Porque a la estampida que se produjo tras el pistoletazo de salida, protagonizada por deportistas en buena forma, le siguió un amplio reguero de mujeres y hombres, de jóvenes y mayores, que a su paso, a su manera, iniciaron el camino con el único fin de llegar a la meta. Algunos y algunas, incluso, se atrevieron a hacer la marcha acompañado de sus niños pequeños.

Entre los que acudieron a tan significativo y simbólico evento estuvieron el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, y los concejales de Turismo, Elías Bendodo, y Participación Ciudadana, Julio Andrade. El regidor del PP ensalzó la voluntad de superación que ayer demostraron los asistentes, virtud que extendió a todas las mujeres que padecen cáncer y que, ayer, eran protagonistas.

Según explicó el regidor, cada uno de los inscritos abonó tres euros, lo que supone unos ingresos de unos 21.000 euros. De esta cuantía global, 10.500 serán repartidos para la lucha contra el cáncer de mama y a las organizaciones que colaboran con los damnificados de Haití.

La edición de este año ha incluido como novedad un nuevo circuito y la creación del premio Mujer y Deporte Theresa Zabell, en el que colabora el Consejo Superior de Deportes. Desde el Ayuntamiento informaron de que tras la celebración de la carrera tuvo lugar un concierto con la actuación de Hugo, uno de los participantes del concurso Operación Triunfo, y un festival de aeróbic. Otro detalle a destacar es que todos los participantes corrieron con un chip en la zapatilla con el que se puede controlar el tiempo que tardaron en realizar el recorrido. A todo ello hay que sumar el concurso de fotografía Carrera de la Mujer convocado por el Consistorio y que incluye un primer premio de 600 euros y dos más de 300 euros.

10.500