Santi Carpintero dejó huella en el Málaga, por más que estuviera sólo un año. Fue el del ascenso. En él resultó pieza clave como medio centro y como tipo que animaba el vestuario y hablaba claro en él. Hoy posee la titulación de director deportivo, hace las veces de empresario en GEDO (firma de material deportivo) y está asentado en Gijón, donde también hace las veces de comentarista para Radio Marca. Estos últimos dos años ha seguido bien de cerca la evolución de Jony, del que habla maravillas y no tiene dudas de que acabará siendo un elemento diferencial en el Málaga. "Lo tiene todo para triunfar", asegura.

Desde que trascendió su preacuerdo con el club de Martiricos, la gente ha podido seguir bien de cerca el fútbol del de Cangas de Narcea, al que Carpintero califica de "extremo puro". Aunque ese perfil no es muy habitual en los esquemas de Javi Gracia, el exjugador leonés avisa de que Abelardo ha adelantado trabajo a su colega: "Aquí le tocaba trabajar y le sacó mucho partido a eso. Ha tenido que ayudar bastante al lateral porque el equipo demandaba eso. Si el Málaga juega con extremos y no tiene tanto desgaste, será un extremo de la leche. Tiene gol, centro, desborde". Un rol parecido al de un compañero que tuvo como malaguista: "Puede ser un estilo a Eliseu. No tan rápido, pero similar. Cuando yo jugaba con él, técnicamente no era como ahora que maduró. Con los años, Jony puede ser como el Eliseu de hoy en día".

Para Carpintero, se trata de un jugador sin techo, al menos si las lesiones le respetan y centra los cinco sentidos en el fútbol. "En Jony no ha habido evolución, sino madurez. El desarrollo de un jugador está en jugar y tener confianza para mostrar lo que vale. El año pasado lo subieron del filial porque en Segunda B era un escándalo. En Segunda hizo lo mismo que en Segunda B. Y en Primera igual. Si le das compañeros para jugar al balón... Igual hasta el Málaga es un trampolín para ir a un grande el día de mañana", advierte Carpin, quien también le ve en proyección "para ir a la Selección". "Es desequilibrante y todos los entrenadores quieren un jugador así. Si progresa, en un club como el Málaga, bien trabajado y que está llamado a hacer cualquiera de estos años una buena temporada, puede estar con España".

No era difícil descubrir que había un proyecto de buen jugador en Jony, aunque él ya avisó a algún amigo del Málaga para que estuvieran atento porque pronto podía descollar. Se alegra Carpintero de que haya sido el Málaga quien se haya llevado la puja. Y está convencido de que los malaguistas disfrutarán bastante con él: "Las aficiones recompensan el trabajo, que seas profesional y des todo por el club. Pero Jony también tiene unas condiciones. Eso es tiene premio y te lo van a agradecer. Si hay trabajo, demostrará todo lo que tiene antes o después. Es un jugador de los que levanta a la gente de los asientos. Tiene chispazos, te hace una jugada rápida, se mete en el área y gol. Y la gente se queda con ese tipo de jugadores".

Otro factor que destaca del canterano sportinguista es la personalidad que ha demostrado. A principios de año se conoció que vendría al Málaga y desde entonces, lejos de hundirse o tener un mal rendimiento, ha tenido actuaciones brillantes, con goles y aportaciones decisivas para la salvación in extremis de su equipo. "Ha estado muy implicado y ha demostrado una profesionalidad brutal. Es verdad que lo ha hecho en su casa y que los valores de esta casa [habla de Mareo] son difíciles de encontrar en gente de fuera, pero ahí está su implicación a pesar de saber que se iba a ir", relata.

No será la primera vez que abandona su casa, y Carpintero cree que ello le ayudará a su aclimatación a Málaga. "A ver cómo se adapta. Es un chaval de aquí de toda la vida, aunque ya se fue al Barcelona o al Avilés. Abelardo lo repescó y centrado ha sido un cañón. Quizá le habrá visto las orejas al lobo y se lleve a Málaga una lección aprendida".