El primer tranvía de Andalucía tiene sus días contados en Vélez- Málaga. La primera unidad será enviada a una ciudad próxima a Sidney la próxima semana, según anunció ayer el alcalde, Francisco Delgado Bonilla (PP). Si será o no un adiós definitivo, no quedó claro tras la intervención del regidor ya que, aunque dijo que "suspensión del tranvía no significa supresión", el contrato también recoge la posibilidad de la venta definitiva de los de los convoyes a la ciudad australiana sin finalmente no hay un acuerdo con el paso de los meses.

"Suspendimos el servicio porque era inviable su mantenimiento para el Ayuntamiento. Este contrato de arrendamiento recoge la posibilidad de que el tranvía vuelva a la ciudad en un plazo aproximado de 15 días si la Junta diera marcha atrás y apoyara al Consistorio en su financiación", reiteró el regidor, quien va a remitir la próxima semana un escrito a la consejera de Fomento de la Junta de Andalucía, Elena Cortés, para celebrar una reunión en el Ayuntamiento donde se aborde la situación del tranvía, cuyo servicio quedó suspendido en junio de 2012.

Delgado Bonilla volvió a insistir en la necesidad de que la Junta de Andalucía se implique en la financiación del tranvía para que este sistema de transporte, que se puso en marcha en la ciudad en octubre de 2006, pueda ser viable económicamente, "ya que el Ayuntamiento en solitario no puede asumir sus costes de explotación y hacer frente a su déficit". Así, señaló que "con esta reunión queremos conocer si la Junta de Andalucía está dispuesta a apoyar un sistema de transporte que ha provocado grandes problemas a las arcas municipales del Consistorio veleño".

Sobre los detalles del contrato de arrendamiento suscrito entre la empresa CAF y la concesionaria del transporte municipal, Travelsa, Delgado Bonilla explicó que se han alquilado por dos años a una ciudad enclavada en el área metropolitana de Sídney, con un canon anual de arrendamiento de 200.000 euros más IVA, que deberá abonar Travelsa al Ayuntamiento. El alcalde destacó el trabajo que se ha realizado para preparar el tranvía para su traslado, "que ha supuesto prácticamente desarmar las unidades y volverlas a montar" para evitar cualquier tipo de contaminación de flora no autóctona en Australia.