El Pleno de Benalmádena dio ayer luz verde, con el voto en contra de IU, a una modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que permitirá el desarrollo de una parcela en la que se incluirá un aparcamiento de cien plazas de uso público situadas en los sótanos de las viviendas proyectadas, aunque su explotación se determinará en un futuro.

Así lo informó el concejal de Urbanismo, Jesús Fortes, que explicó que gracias a esta innovación se podrá desarrollar la construcción de 27 viviendas, de las que ocho serán de protección. Esta aprobación también permitirá que más de 800 metros de zona verde privada pasen a ser consideradas de titularidad municipal y además se reservará una zona de 275 metros cuadrados para equipamiento público. La operación urbanística también contempla un vial que serviría para dar acceso a los garajes de los vecinos de la zona. En la misma sesión también se aprobó inicialmente la creación de un registro de demandantes de viviendas protegidas.

Regularizar la situación del transporte urbano de Torremolinos. Esto es lo que pretende el Ayuntamiento de Torremolinos y por ello ayer se dio a conocer que se ha decidido resolver el contrato provisional y en precario que se mantenía con la empresa Portillo desde año 1989. Según se informó desde el Consistorio, con esta decisión se pretende mejorar la situación del municipio ya que la empresa, que se encargaba hasta ahora del servicio urbano e interurbano, ha cerrado las instalaciones que mantenía en el centro y las ha trasladado a un local "tres veces más pequeño", situado justo en frente de las anteriores.