El Unicaja hizo oficial la renovación de Fran Vázquez. El pívot seguirá defendiendo la camiseta del equipo en el que se formó. Con este acuerdo podrá continuar desarrollando el trabajo de este año. "Ya está la renovación firmada. Ha sido largo por algunos flecos que surgen durante las negociaciones, pero el club y yo siempre hemos querido llegar a un acuerdo y estar unidos durante mucho tiempo. Es un deseo que había desde ambas partes", aseguró el gallego.

Su buen rendimiento en play off puso el broche a una gran temporada, en la que logró la regularidad que se le echó en falta en su vuelta al Martín Carpena. Adquirió la relevancia que se le pedía y tomó la responsabilidad en momentos cruciales. "He estado muy bien durante todo el año y especialmente al final. Tuve suerte y me salieron unos buenos partidos", opinó al respecto. Ha sido decisivo contra Herbalife Gran Canaria y Real Madrid. En los siete partidos que disputó en la postemporada (tres frente a Gran Canaria y cuatro ante el Real Madrid), promedió unos buenos números, 12,1 puntos, 6,2 rebotes y 13,8 de valoración contra pívots de la envergadura de Walter Tavares (2,21) y Salah Mejri (2,16).

Vázquez fue uno de los mejores jugadores defensivos de la Liga Endesa, líder de tapones de la temporada regular con 1,71 de media, y de la Euroliga. De hecho, ya forma parte de la historia del baloncesto en este apartado. Es el que más bloqueos ha hecho desde que la Euroliga pasó a su nuevo formato, 223 en 207 partidos, y el segundo mejor intimidador de la ACB con 616, únicamente por detrás de Romay (671).

Después de la renovación de jugadores tan importantes para la plantilla como Granger, Dragic y Suárez, con la continuidad de Fran se consolida la columna vertebral del conjunto. Tras formar un grupo prácticamente nuevo el año pasado, entrenador incluido, la respuesta del equipo estuvo por encima de las expectativas. "Siempre he dicho que cuanta más gente haya de una temporada para otra, mejor. Si hay muchos cambios hay que empezar de cero, pero mantener el 70% de la plantilla es de gran ayuda para que se adapten más fácilmente los compañeros que lleguen", explicó el pívot.

En cuanto a los objetivos para la próxima campaña, "repetir o superar lo de este año sería un gran éxito, pero lo principal es llenar el Carpena. Creo que la llegada de Plaza al equipo ha dado un cambio en sentido gracias a su filosofía de dar lo máximo en cada partido", señaló el 17 de Unicaja. Además, animó a la afición a que mantenga la ilusión generada esta temporada por el equipo. "He visto que ya estamos superando la cifra de abonados del año pasado. Sólo puedo decirle a nuestros aficionados que vamos a luchar por que disfruten como el año pasado, y a los que están fuera y todavía no tienen su abono, decirles que se unan a nosotros, que seguro van a disfrutar y van a ver al equipo dejándose la piel en la pista".

Se refuerza así su relación con la afición, que no siempre ha sido tan buena como ahora. Tras crecer en categorías inferiores de Unicaja y algunas idas y venidas como cedido a Bilbao y Gran Canaria, fue seleccionado en el número 11 del draft de la NBA. Finalmente renunció a jugar la liga estadounidense para recalar en el Akasvayu Girona. Tras unos años convulsos fichó por el FC Barcelona, donde ganó tres ligas, una Copa del Rey y una Euroliga. Volvió a Unicaja mediante un polémico intercambio con el alero Álex Abrines.

A sus 31 años, en función de cómo le respeten las lesiones, puede que sea su último gran contrato. Por lo tanto, su decisión de seguir en Málaga demuestra su compromiso con el club, al que regresó en 2012 con el objetivo de devolver a la élite al baloncesto malagueño.