El Unicaja va liquidando con precisión quirúrgica a todos los rivales de la zona media-baja de la ACB que visitan el Martín Carpena. El Fuenlabrada pasó por la piedra como antes Andorra, Manresa, Gipuzkoa y Tenerife. Todo ellos con un guión parecido, en el que el Unicaja no necesita meter más allá de su cuarta marcha para darles cloroformo y sumar una victoria más. El 8-1 da valor a esta racha del primer cuarto de competición con poco precedente en la historia del club. El calendario amable en casa no le resta mérito del equipo de Joan Plaza. Se corre el riesgo de banalizar las victorias cuando se acostumbra uno a vencer con continuidad y es labor del técnico mantener encendida esa chispa. Ese hábito de ganar es el que diferencia al equipo grande del corriente. Es por eso que el técnico catalán diera un toque en la pista, cambiando a cuatro jugadores de una tacada en el último cuarto, y en la sala de prensa. Hay que agitar el avispero para evitar la monotonía. El pobre último cuarto cajista maquilló la diferencia final (72-63), no relevadora del enorme hueco existente entre los dos equipos.

No hubo demasiada oposición enfrente, el Fuenlabrada exhibe cierta desazón y falta de confianza, sus jugadores de referencia no están finos y la rotación es corta. Apetecía ver la evolución de Alberto Díaz, acumulando partidos de ACB para regresar un día a Málaga. Aún no se le observan demasiados progresos al pelirrojo, que cumple aseadamente con buena labor defensiva y distributiva pero que debe ser más desequilibrante para tener una oportunidad en el Unicaja. El equipo malagueño comenzó mandando (7-0) con Toolson de galvanizador, pero el Fuenlabrada contuvo en primera instancia la escapada malagueña. De todas maneras, el partido tenía su destino escrito y era una victoria del Unicaja, la octava. La mejor noticias de todas fue ver a Stefan Markovic en un nivel alto de juego, como si las molestias en el pie que le atormentan hubieran desaparecido. Dominador del ritmo del partido, con la jerarquía para hacer funcionar todo el entramado ofensivo, como en su mejor versión. En Berlín se le había visto superado por el ritmo del partido, ayer lo llevó. Veamos si es un fogonazo o una realidad. Es esencial en el engranaje de Joan Plaza.

Con la ausencia de Kostas Vasileiadis, la rotación exterior se redujo, pero en cambio Plaza alargó la interior con la presencia de Maodo Nguirane, que ofreció una imagen  buena, de que puede hacer una  rotación interesante ante rivales de este nivel y descargar de minutos a los pivots. Capturó cinco rebotes en ocho minutos y se mostró activo y brioso. Fue un Unicaja más solidario que en Berlín, donde sólo dio nueve asistencias. Ayer repartió 18, con buenos momentos de circulación y situaciones ventajosas en el interior. Sólo se tiraron 14 triples porque el ataque se centró dentro. La buena defensa permitió dejar al rival en un raquítico 32% en tiros de campo. Y con ese colchón es complicado perder un encuentro.

Al descanso el Fuenlabrada apenas aguantaba el tipo (41-30) y ya en el tercer cuarto la tijera se abrió casi hasta los 20 puntos. Entre el jolgorio de un Carpena con ganas de aplaudir a pesar de que el partido devino en un trámite y algún bostezo inevitable el partido se acabó al entrar en el último cuarto, 10 minutos antes del final. El Unicaja se abandonó y sólo metió ocho puntos. No es lo ideal, pero es una lección para el futuro. No hubo peligro real de complicación. Pero era el Fuenlabrada. Ante otro de más fuste puede ser problemático.

Ficha técnica:

72 - Unicaja (19+17+23+8): Granger (4), Toolson (14), Suárez (2) Thomas (5), Golubovic (6) - cinco inicial- Vázquez (11), Nguirane (2), Kuzminskas (8), Markovic (8), Green (8) y Stefasson (4).

63 - Montakit Fuenlabrada (17+13+16+17): Rodríguez (2), Baron (15), Panko (13), Clark (6), Akindele (7)- cinco inicial- Diagné (9), Miso (5), Díaz (3), Vega (3) y Smits (0).

Árbitros: Jiménez, Araña y Cardús.

Incidencias: Partido correspondiente a la novena jornada de la Liga ACB disputado en el Palacio de los Deportes, José María Martín Carpena ante 7.500 espectadores.