El alcalde de Marbella, José Bernal, avanzó ayer que prácticamente la totalidad de las inversiones municipales previstas en los presupuestos de 2017, aún pendientes de aprobación, se destinarán a arreglar los destrozos causados en distintos municipios como consecuencia del temporal del pasado mes de diciembre. "Desde el Ayuntamiento hemos gastado ya con recursos propios, afectos al presupuesto prorrogado, casi un millón de euros y que tenemos que abonar este ejercicio 2017", señaló el regidor, que criticó que a día de hoy "no hemos recibido nada del Gobierno central, pese al compromiso que hubo, ni siquiera una llamada para comenzar a liberar partidas".

En este sentido, mencionó entre intervenciones ejecutadas como el adecentamiento de la zona de Plaza de Toros, la actuación en las playas y el paseo marítimo de Las Chapas, en la avenida del Calvario, en la avenida Julio Iglesias, en la zona de La Campana de Nueva Andalucía y en diferentes puntos de San Pedro Alcántara. Además, el temporal ocasionó la caída de muros de colegios y guarderías municipales.

"Este mismo año estamos ejecutando obras de emergencia, de inmediatez para mantener unos mínimos de seguridad en el municipio en cuanto a infraestructuras que se valoran en unos cuatro millones de euros", abundó Bernal, quien subrayó que Marbella fue "el municipio más dañado de toda la Costa del Sol y, además, en el que hubo un compromiso de que se iba a realizar un esfuerzo que no llega". "Los ciudadanos de Marbella no entenderían que teniendo un superávit de 50 millones de euros se vayan a Madrid y que de nuestros bolsillos tengamos que acometer obras que le corresponden tras la declaración de zona catastrófica", lamentó.

El alcalde visitó ayer junto al delegado del gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, las obras de drenaje realizadas en el cruce del arroyo de las Piedras dentro de las actuaciones de emergencia emprendidas tras el temporal. El coste de la reparación fue de 115.000 euros, "asumido íntegramente por el Ayuntamiento". Este aporte económico va a permitir no solo reponer la situación original de la zona al estado anterior a la tromba de agua, "sino solucionar un problema de obturación ocasionado en este arroyo cada vez que venía una afluencia importante de agua que perjudicaba a la playa, al paseo marítimo y los negocios aledaños".