La Junta y el Ayuntamiento de Marbella colaboran en la retirada de los peces muertos que han aparecido en la desembocadura del río Verde. Operarios de la Delegación de Medio Ambiente en Málaga destinaron toda la mañana de ayer en retirar los ejemplares, fundamentalmente barbos y bogas. Los primeros análisis que se han realizado para determinar las causas de la mortandad apuntan a la anoxia nocturna o falta de oxígeno, un fenómeno natural que se produce como consecuencia del descenso del caudal del río.

La reducción del volumen de agua provoca que los peces queden atrapados en pozas de agua estancada que no reciben el oxígeno que aportan las corrientes, de modo que los peces mueren por asfixia.

El fenómeno se ha producido en un punto en el que el cauce fluvial ha perdido el contacto con el mar en su desembocadura, quedando los peces atrapados en el área fluvial y falleciendo por esa la falta de oxígeno. Trabajadores del Ayuntamiento de Marbella se han ocupado de eliminar en las instalaciones de tratamiento los pces muertos, al tiempo que han efectuado labores de limpieza en la desembocadura del río Verde con maquinaria pesada para facilitar que el cauce fluvial vuelva a conectar con el mar.