En algo tiene mucha razón Susana Díaz, la nueva líder del PSOE andaluz: su partido "sale bien cosido" de este congreso extraordinario de Granada. "Que nadie rompa las costuras", arengó a sus delegados. Poco antes de que dieran los primeros segundos del domingo, Díaz cerró una Ejecutiva sin ningún tipo de problemas, una dirección de una edad media de 42 años que fue respaldada por el 96% de los delegados. 30 puntos más que la última dirección del saliente José Antonio Griñán.

Ni los delegados más veteranos recordaban un congreso en el que el líder, aun siendo respaldado por su partido, no tuviera ni que negociar la dirección. Manos libres. "Esto nunca ha sucedido, ni con Felipe González", comentaba en los pasillos uno de ellos. En efecto, a Díaz le bastó unas conversaciones previas con los secretarios provinciales para cerrar en pocas horas su dirección, presidida por Micaela Navarro, una de las personas más aplaudidas en el día de ayer en este congreso de la renovación. Quizás ella, junto al sevillano José Caballos, la granadina Clara Aguilera y la malagueña Marisa Bustinduy, sean los más expertos de una Ejecutiva donde hay muchos jóvenes y bastantes alcaldes, y en el que el gaditano Juan Cornejo asumirá las labores de secretario de Organización. Él será quien ofrezca la primera rueda de prensa de esta dirección esta mañana, aunque Cornejo no ejercerá como un número dos al uso, ya que ésta será una dirección más igualitaria.

Y puestos a renovar, Díaz también cerró su sucesión en Sevilla, donde Verónica Pérez, nacida en 1978, sustituirá a Fernando Rodríguez Villalobos, de 1952, al frente de la secretaría provincial. Villalobos ha sido uno de los mentores de Díaz, pero la secretaria general ha optado por un cambio generacional también en su provincia, de modo que el presidente de la Diputación sevillana encabeza el listado de socialista andaluces que irá a los comités federal del PSOE. Le sigue Amparo Rubiales, la también veterana militante que ha dejado la presidencia de la Ejecutiva.

En la nueva dirección, compuesta por 31 miembros, hay ocho de Sevilla, entre ellos Carmelo Gómez, actual vicesecretario de Organización, de tal modo que su nombramiento también le despeja el camino a Verónica Pérez, la que sin duda fue la primera susanista, una de las personas que creyó en ella antes que el propio Griñán. Las siguientes provincias en número son Granada y Almería, con cuatro cada una. El alto número de Almería en comparación con su número de afiliados obedece a la escasa representación de esta provincia en el Gobierno andaluz. Las demás cuentan con tres.

El malagueño Francisco Conejo se hace con la secretaría de Política Institucional, una de las más importantes, a quien sigue Rafaela Crespín, alcaldesa de La Carlota (Córdoba) y encargada del secretariado municipal.

Una vez superado con notable éxito su primer congreso, Díaz deberá enfrentarse ahora a la acción de Gobierno y a las elecciones europeas, que darán cuenta de si se están produciendo cambios en la opinión pública andaluza. La nueva líder le pidió a los delegados en la clausura del congreso que se tomasen estas elecciones como si fueran unas municipales. El PSOE ha perdido los tres últimos comicios en Andalucía, incluido las autonómicas de 2012. "Hay que empezar el cambio con las europeas", subrayó.

La también presidenta de la Junta realizó dos anuncios al cierre del cónclave. La Consejería de Salud contratará en 2014 a mil nuevos profesionales de la sanidad. Serán médicos y enfermeros, en general, para cubrir la baja tasa de reposición que impone el Gobierno central, pero también para cubrir otras bajas aunque no sea mediante ofertas públicas de empleo. "De manera inminente", la Junta conectará a 8.000 andaluces más por el servicio de teleasistencia. El discurso final de Díaz tuvo un tono más social que el del sábado, que fue de autocrítica. Pasados los días de rosas en Granada, los socialistas vuelven hoy a la realidad.