La llegada de Jorge Garbajosa a Málaga provoca un excedente mayor en la plantilla del Unicaja. Los ojos apuntan a Guille Rubio cuando Carlos Jiménez se recupere, pero resulta que hay otro jugador en la misma posición, la de ala-pívot, que está ya fuera de la plantilla desde hace semanas, cuando se le relegó para darle hueco a Nedzad Sinanovic. Y es el jugador que más cobra de la plantilla, Giorgos Printezis. Un cambalache que todas las partes entienden que es perjudicial y al que hay que poner solución cuanto antes.

Salvo una lesión importante o una bajada de rendimiento inesperada de algún jugador, Printezis no va a jugar más con la camiseta del Unicaja. Al menos esta temporada. Por ello, el club y al agente del jugador, Giorgos Dimitropoulos, han intensificado las gestiones para encontrarle acomodo al jugador nativo de la isla de Syros. El escenario ideal para el Unicaja sería finalizar la relación, pero el elevadísimo contrato firmado de cara a la temporada siguiente (por encima generosamente del millón de euros) hace tremendamente difícil la gestión, vista la recesión del mercado y el decadente rendimiento del jugador griego en Málaga, que ha hecho decaer bastante su caché.

El Unicaja valora la cesión hasta final de temporada de Printezis para ponerle en el escaparate y, de alguna manera, revalorizarle porque no deja de ser un activo propio, aunque sea pagado a precio de oro. Será más difícil encontrarle acomodo en verano sin haber jugado medio año y por ello el Unicaja asume que no recibirá una compensación alta de ningún club por estos meses, pero que la cesión puede ser válida para rescindir en verano la vinculación. Grecia y Rusia son las vías que explora Dimitropoulos para darle salida. En su país natal no hay demasiadas alternativas. La crisis económica azota con virulencia al baloncesto, la liga languidece, incluso los gigantes Olympiacos y Panathinaikos han tenido algún retraso en los pagos. La opción de volver al club de El Pireo, de donde salió, sería la más atractiva, pero Ivkovic ya tiene una larguísima plantilla. El Panathinaikos no se contempla por cuestiones sentimentales. Panionios y PAOK son otros de los clubes tanteados. En Rusia hay continuos movimientos. Hace poco llegó al Khimki, por ejemplo, Lazaros Papadopoulos, que no anduvo lejos de venir a Málaga cuando se buscaba el center que finalmente se encontró en la figura de Sinanovic. En verano, el Unicaja ya se movió para colocar a Printezis visto que Aíto le había bajado el pulgar. Le ofreció al CSKA, pero el club moscovita rechazó el movimiento.

El cuerpo técnico no tiene ninguna queja de la actitud de Printezis y destaca su profesionalidad y buen comportamiento. El propio jugador, en la reunión en la que se le comunicó que sería cortado, admitió que entendía la decisión visto su pobre rendimiento que ni él mismo consigue explicarse. Está adaptado, le gusta la ciudad, pero atraviesa un bache del que no se recupera.

Printezis trabaja como uno más y no se le ha desplazado, pero está en la lanzadera de salida de Málaga. El jugador también necesita jugar, aunque sea en un club de expectativas menores para recobrar la confianza. En el horizonte está el verano y la selección. Printezis estuvo en los Juegos de Pekín'08, el Europeo de Lituania'09 y el Mundial de Turquía'10 y quiere seguir en el combinado heleno, imposible hacerlo si no juega. Illias Zouros, que tuvo a Printezis en las categorías inferiores del Olympiacos, es el nuevo seleccionador, a la sazón entrenador del Zalgiris Kaunas, y llega con ideas nuevas. Un Printezis inactivo no entra en sus planes. Ni tampoco en los del Unicaja, que espera su salida, asumiendo que tendrá que pagar casi la totalidad de su elevadísima ficha.