Los ayuntamientos de Málaga, Marbella, Vélez-Málaga y Estepona anunciaron medidas de «ahorro» ante la crisis económica, así mediante planes de austeridad, saneamiento o la congelación de los sueldos de los cargos públicos, todos inciden en la necesidad de reducir el gasto corriente de las corporaciones municipales.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, solicitó en este año «excepcional y muy difícil» la existencia de una negociación «más intensa» entre el Estado y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) que permita una mejor financiación local y «no obligue» a las corporaciones locales a subir los impuestos.

Así, el primer edil del Ayuntamiento malagueño apuntó como posibles medidas para hacer frente a la crisis económica, la congelación de los sueldos de los cargos municipales, aunque incidió en que «no es la solución al problema».

No obstante, habrá que esperar a la celebración de una reunión, el próximo 9 de septiembre, convocada por el alcalde socialista de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, en el Ayuntamiento maño con los concejales de Hacienda de los Gobiernos locales de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Málaga y la propia capital aragonesa para estudiar una respuesta común a la propuesta de presupuestos presentada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que recorta el fondo estatal para los ayuntamientos en 2009.

Marbella: reducción en personal y actos públicos

Por su parte, el Consistorio de Marbella, encabezado por Ángeles Muñoz, afirmó en declaraciones a Europa Press que continuará con lo que se comenzó en el año 2008 cuando la alcaldesa se bajó el sueldo un 30 por ciento y el de los concejales un 20 por ciento.

En cuanto al gasto corriente del pasado año, éste se disminuyó en un 74 por ciento. Asimismo, Muñoz indicó que «queremos que se mantenga todo lo que es la capacidad inversora de la ciudad por lo que si habrá un incremento en inversión y partidos sociales, únicamente subirán estos conceptos y el resto de concejalías verán disminuida su partida presupuestaria».

Del mismo modo manifestó la reducción de actos lúdicos, deportivos o verbenas, a pesar que declaró que en 2009 se incrementarán los presupuestos por «la buena gestión de este año pero servirá para pagar las deudas, inversiones y políticas sociales».

Vélez -Málaga: creación de una central de compras

El regidor de Vélez-Málaga, Francisco Delgado Bonilla, también llevará a cabo un plan de austeridad en el gasto corriente que se materializará mediante la creación de una central de compras que entrará en funcionamiento el próximo año y que unificará los pedidos de todas las dependencias municipales «consiguiendo así precios en mejores condiciones», resaltó el alcalde.

Además, se procederá a la puesta en marcha de un Plan de Saneamiento de las cuentas municipales, que fue aprobado en el pleno del mes de agosto, y a la rebaja de la precisión fiscal mediante la reducción el tipo impositivo del Impuesto de Bienes Inmuebles que actualmente se encuentra en el 0,85 por ciento.

Delgado Bonilla apuntó que su Gobierno es «austero» desde que se inició la presente legislatura y agregó que para ello se suprimieron los organismos del Patronato de Deportes y el de Servicios Sociales, así como derogar la tasa de basura domiciliaria y el sueldo de los cargos públicos, ediles y cargos de confianza; aminorando el presupuesto en materia de personal «en casi 20 millones de pesetas», recalcó.

Estepona no renueva los contratos temporales

El nuevo equipo de gobierno del Consistorio esteponero, regido por David Valadez, anunció tiempo atrás medidas para contener el gasto público como la reducción en un 20 por ciento del sueldo del primer edil y de un cinco por ciento el de los concejales. No obstante, desde el PP criticaron que la medida aún no se ha llevado a pleno y que el alcalde sigue siendo el mejor pagado de España.

Dentro de la política de contención de gastos, el Consistorio despidió también a una decena de cargos de confianza y contratos de alta dirección, permitiendo sólo un cargo de confianza por concejal y por delegación como ocurría anteriormente.

Otras de las medidas establecidas por Valadez es que los trabajadores con contratos temporales no podrán renovar ya que la orden fue la de «no prorrogar ninguno de estos contratos a no ser que sea estrictamente necesario», para así, contener más el gasto.