La Feria, al igual que la Semana Santa, es una de esas fechas en el calendario en las que se presupone la reunión y el reencuentro. Algunas cofradías de Málaga han decidido hacer de los muros de su casa de hermandad el lugar perfecto para reunirse en Feria.

El pasado mes de julio el área de Comercio del Ayuntamiento de Málaga permitió a las cofradías y hermandades de Málaga utilizar las instalaciones de sus casas hermandad para convertirlas en casetas de feria.

La Arhicofradía de Pasión decidió acogerse a esta norma y montar por tercer año consecutivo su caseta El Farol en la calle Convalecientes de la capital.

Según explica el hermano mayor de esta cofradía, Joaquín Orell, "nosotros montamos la caseta para recaudar fondos para construir un centro de mayores para 500 personas en Caicara del Orinoco, en el Amazonas, en colaboración con la Diócesis de Málaga. Nosotros estamos aquí desde hace tres años, pero no sabemos si la crisis nos afectará", reconoce el regidor de la cofradía.

Otra de las cofradías que ha escogido su propia casa hermandad para celebrar la Feria, ha sido la hermandad de Jesús El Rico. La cofradía del Miércoles Santo ha colmado de farolillos y música los cimientos de su sede en calle Victoria, a la cual han bautizado como La Ochava, recordando el palio ochavado de su titular la Virgen del Amor.

Siguiendo en la Feria del centro algunas cofradías decidieron cerrar sus instalaciones para uso y disfrute de sus hermanos. Es el caso de la cofradía de Estudiantes. Su hermano mayor, Pablo Atencia, explica que no han hecho uso de este derecho porque "es necesario movilizar a mucha gente y la Feria no es nuestro principal fin".

La cofradía del Dulce Nombre decidió este año que en la Feria tenía que dar tiempo a todo, por lo que sólo abrieron su caseta durante los primeros días de Feria.

José Carlos Montes Zurita, hermano mayor de la corporación de Capuchinos, explica que "los hermanos también tienen derecho a disfrutar de la Feria y estar todo el día trabajando en la caseta. Nosotros no hacemos esto para ganar dinero, porque ni siquiera ponemos tabla de precios, sólo abrimos nuestras puertas, preparamos comida y todo el mundo está invitado a venir".

Ya en el Real también son muchas las cofradías que, lejos de los muros de sus casas hermandad, han decidido también crear su caseta y fomentar la convivencia entre los hermanos. Son las siguientes: Caoba y Plata (Humillación), El Bandido (Zamarrilla), El Bulerito (Columna), La Alegría (Alegría), La Bouganvilla (Expiración), La Cuesta (Crucifixión), Los Cisnes (La Sentencia), La Enramá (Hermandad del Rocío de Málaga), La Jabera (Humildad), Los Limones (Monte Calvario), Palma y Olivo (Pollinica) y Un Poquito Más (Salutación).