El cantante, que hace unos días salía de compras para comprar artículos de belleza y que saludó amistosamente a sus fans tras el muro infranqueable de sus guardaespaldas, acaba de mudarse a Las Vegas a una mansión al más puro estilo español.

Aparentemente, nada fuera de lo normal, si no fuera porque a pocos metros se encuentra una escuela con más de 600 alumnos, de entre cuatro y trece años.

Muchos padres han declarado que se sienten inseguros porque "Jack puede verlos cuando bajan del autobús escolar para dirigirse a la escuela".