El nuevo carné empezó fuerte el día 1 de junio de 2006: 17 conductores perdieron puntos en sólo diez horas. Desde entonces, 45 malagueños al día ven como su saldo disminuye al ser multados por los agentes de la Guardia Civil o los de la Policía Local de Málaga capital. Al cumplir su primer aniversario, 16.000 conductores habían perdido más de 61.000 puntos y 11 estaban ya sin carné. Además, la provincia de Málaga es la segunda provincia española en número de permisos de conducir retirados o en trámites de serlo.

Las consecuencias desde la implantación del sistema y su efectividad se han dejado notar en la provincia. El carné por puntos ha ayudado para disminuir la siniestralidad un 12 por ciento durante el primer año de implantación. También ha bajado la velocidad media en la carretera, aunque en ello tienen mucho que decir los siete radares fijos que hay en la red de carreteras.