La Policía Nacional ha desarticulado, con la detención de catorce personas, una organización que tenía planeado distribuir en España más de cuatro toneladas de hachís que adquiría en Marruecos.

Según ha informado la Dirección General de la Policía, los detenidos son de nacionalidad española y marroquí y han sido arrestados en Málaga, Almería, Murcia y Cuenca.

Los cabecillas se asentaban en Málaga, desde donde presuntamente organizaban la compra de la droga en Marruecos para su traslado y venta en diferentes localidades españolas.

La investigación comenzó el pasado mes de julio, cuando se supo que la banda iba a realizar un intercambio de hachís en un centro comercial de Murcia. Los agentes frustraron la entrega de 1.500 kilos de esa droga y detuvieron a cuatro personas.

Las pesquisas determinaron que se trataba de un grupo estructurado con un claro reparto de tareas: mientras los cabecillas organizaban la compra de hachís desde Málaga, otros miembros se encargaban del transporte hasta unos puntos en los que otras personas distribuían el estupefaciente.

Para el transporte utilizaban vehículos robados y con las placas dobladas.

Recientemente, los investigadores averiguaron que se iba a producir una entrega de hachís, por lo que establecieron un dispositivo con el que localizaron y detuvieron en un área de servicio de Cuenca a otros seis supuestos miembros de la banda cuando se disponían a traspasar tres toneladas de hachís.

De manera simultánea fueron arrestados otros tres implicados más en Málaga y otro componente del grupo en Almería.