La barriada de La Trinidad, una de las señas de identidad del nacimiento de Málaga, está viviendo una situación "terrible", "desagradable" y "deplorable". La inseguridad reina en las calles, la suciedad impregna los solares, las ratas campan a sus anchas y la delincuencia se impone a la justicia. Una realidad demasiado dura para asimilar que ayer fue denunciada ante los medios por el portavoz de IU en el Ayuntamiento, Pedro Moreno Brenes, y por varios vecinos del barrio.

Si hay una palabra para describir lo que estos vecinos viven a diario, esa palabra es "miedo". Y es lógico viviendo en un entorno donde se esconden traficantes de droga, okupas, morosos y noctámbulos que realizan carreras ilegales. "Un ambiente que ninguno querríamos para nuestros hijos", como expresó ayer Moreno Brenes, quien a través de una carta al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, instó al gobierno y a la Junta a "la ejecución de los planes para un proyecto integral de rehabilitación y mejora del barrio de la Trinidad".

Asimismo, el portavoz de IU también exigió "actuaciones urbanísticas" para realizar las mejoras más urgentes del barrio, que "se refuerce y garantice la seguridad de los ciudadanos en colaboración con las fuerzas y cuerpos del Estado" y que "se controle el menudeo de estupefacientes". Unos acuerdos que ya se aprobaron en el Pleno celebrado en enero en una moción presentada IU.

Los vecinos de La Trinidad llevan años pidiendo soluciones. Pero las protestas son vanas y anodinas. "La patada en la puerta" (okupas) sigue siendo el deporte local. Por ello, Moreno Brenes ha anunciado movilizaciones si el PP no actúa pronto. "Si queremos que la gente viva con dignidad, hay que adoptar medidas", dijo.