Carteras cargadas de ilusión y, posiblemente de millones de euros. Málaga, como cualquier provincia del país, despertará hoy con un espíritu optimista entrelazado con el canto de los niños del colegio de San Ildefonso, que repartirán la suerte en el tradicional sorteo extraordinario de Navidad a partir de las 9:00.

Las expectativas son altas, tanto entre compradores como administraciones de lotería. "A pesar de que se sigue notando un poco la crisis, aquí los abonados están todos vendidos", señala Pilar Cadenas, propietaria de la administración número 12, en calle Bolsa. Así, tras años de descenso y estancamiento en la compra de décimos para este sorteo, las ventas parecen aumentar ligeramente un año más. Según fuentes de Loterías y Apuestas del Estado, el crecimiento del ejercicio anterior fue del 6,64% y para 2015 se espera una cifra similar. "Si el pasado año había un relativo optimismo y acabamos con un 6,64% este 2015 se incrementará más del 5% casi con total seguridad. Algunos estiman hasta un aumento 20% pero eso no es lo normal", explican.

Pocos son los que resisten a comprar, al menos, un número para el Gordo, por lo que ayer muchos esperaban su turno en la administración de Puerta del Mar. Los más rezagados buscaban a última hora terminaciones concretas en este punto, donde no paró el goteo incesante de clientes a lo largo de toda la mañana. "Suelen pedir la terminación en 37, ya que fue el número en el que acabó el Gordo del año pasado; pero también los típicos: el 13, el 15 o el 69", indica Mónica Azuaga, propietaria de la administración La Malagueña.

A pesar de los estragos que las obras del Metro en la Alameda Principal están causando en este punto de venta, Azuaga destaca la afluencia de compradores durante las jornadas del puente de la Inmaculada. Muestra de ello eran las colas de clientes que podían observarse aún los días posteriores a este festivo en la Administración El Gato Negro, localizada en calle Granada, o La Biznaga, en calle Mármoles.

Los malagueños esperan que la fortuna les sonría a lo largo de la mañana y para ello han buscado estos días décimos con cifras simbólicas que atraigan a la suerte: fechas de nacimiento o de celebraciones especiales como bodas son muy recurrentes a la hora de depositar la ilusión del Gordo. "Nos hemos quedado sin 3 y sin 7, pero el primero que se agota es el 13", explica una empleada de la administración número 24, en la zona de Gamarra.

"Vamos buscando casi siempre números impares como el 3, el 7 o el 9; pero sobre todo el 5 porque es el que más veces ha salido, un total de 32. Pero en general vamos seguimos los impulsos sin ninguna lógica. Los 100.000 números están en el bombo y tienen la misma posibilidad. Es azar puro", argumentan las fuentes de Loterías y Apuestas del Estado.

La superstición sigue siendo clave en este sorteo estrella para cazar el Gordo y muchos mantienen la tradición de frotar el décimo en imágenes o bustos de brujas, como en el caso de la administración La Malagueña, para llenar sus bolsillos con el premio y poder descorchar las ansiadas botellas de cava.

La provincia ha sido agraciada con el primer premio hasta en ocho ocasiones -la última vez que el Gordo visitó Málaga fue en 2012- y, de nuevo, busca el mismo destino que Justino, el protagonista del anuncio de la Lotería de Navidad de este año. Los ojos estarán puestos desde bien temprano en el Teatro Real de Madrid para ver dónde cae la lluvia de millones de la que muchos sueñan con arañar un pellizco. Un ambiente de optimismo que aunque no deje un halo de fortuna entre los clientes siempre repartirá salud. Pero, como bien dice el refrán, "la esperanza es lo último que se pierde".