ángel Burgos -el hombre de 44 años de edad que tardó cinco horas en ser atendido de un ictus que le dio en las mismas Urgencias del Hospital de Antequera- falleció ayer por la tarde. Su familia transformó la tragedia en un acto solidario al donar sus órganos. "Ha fallecido un buen hombre", informó su cuñado, Bernardo Reina. "Él no era donante, pero había dicho verbalmente que quería serlo, así que la familia ha respetado su voluntad", dijo.

Tras la donación, el cuerpo fue llevado al Instituto de Medicina Legal (IML) para la autopsia, debido a que hay un proceso judicial en marcha después de que la familia pusiera una denuncia el lunes pasado a través de la Asociación El Defensor del Paciente contra el Hospital de Antequera por presunta imprudencia. Posteriormente, el cuerpo será llevado a Fuente de Piedra, municipio del que es oriunda la familia.

Sobre el anuncio hecho ayer por la consejera de Salud, Marina Álvarez, de que la Junta valora introducir cambios en los protocolos de Urgencias para evitar casos como el de su cuñado, Reina manifestó: "Si conseguimos eso, algo es algo. Es un precio muy alto el que hemos pagado, pero salvará vidas".

El Defensor del Paciente indicó que en el informe clínico de su fallecimiento se hace constar que acudió al Hospital de Antequera por dolor de cabeza y mareos y que tras su exploración fue llamado repetidas veces por el médico que lo atendía en ese centro sanitario, pero que no acudió, siendo encontrado más tarde en un sillón de la sala de Urgencias con bajo nivel de conciencia.

"No es admisible bajo ningún concepto que un paciente al que le da un ictus en la sala de esperas de un hospital, dependiente del Servicio Andaluz de Salud, tarde cinco horas aproximadamente en ser atendido, cuando el factor tiempo es fundamental para evitar daños cerebrales importantes en estos casos", señaló el letrado de la asociación, Damián Vázquez. Desde esta organización se hizo un llamamiento a que se tomen las medidas organizativas pertinentes en las Urgencias del SAS "para evitar que sigan aumentando las muertes por negligencias médicas".

El diagnóstico de la muerte de Ángel es accidente cerebro vascular con daño cerebral severo.