Un hombre ha sido condenado a un año de prisión por la Audiencia Provincial de Málaga por robar varias joyas en una vivienda de Campanillas a la que se coló por la ventana de la cocina después de escalar una altura de cinco metros. El delito que se imputaba era el de robo con fuerza y se ha tenido en cuenta como agravante la reincidencia, ya que en 1995 fue condenado por un delito similar. El tribunal también ha previsto el atenuante de dilaciones indebidas debido a que los hechos ocurrieron en octubre de 1997 y no se han enjuiciado hasta 10 años después.

Según el fallo de la Sección Primera, el individuo actuó en compañía de otra persona que no ha sido identificada. Escalaron y accedieron a la vivienda, donde lograron robar varias joyas valoradas en algo más de 5.000 euros. El compinche del condenado huyó con el botín, pero él fue interceptado en el interior de la casa por un hermano de la dueña, que lo retuvo hasta que llegó la Policía.

La Sala, para condenar a Marcos Javier Gámez, ha tenido en cuenta el testimonio de esta persona que logró interceptar al ladrón y consiguió retenerlo hasta que llegaron los agentes. El acusado, en ese momento, se hizo pasar "sin éxito" por Policía, manifestación que para el tribunal "desvirtúa" el hecho de que pretendiera hacer creer que simplemente se encontraba en las escaleras cuando fue pillado. La sentencia califica de "fiable y veraz" el testimonio del testigo.

Además del año de prisión, el condenado debe pagar a la propietaria de la casa asaltada una indemnización de una cantidad similar a la suma en que han sido tasadas las joyas.