La Junta de Andalucía afronta definitivamente la adjudicación del contrato que debe permitir reactivar este mismo verano el tramo del Metro Renfe-Guadalmedina, en estado de paralización desde hace ya casi tres años. Tras conocerse la valoración técnica otorgada por la mesa de contratación a las doce proposiciones empresariales que pugnan por esta actuación, valorada en casi 30 millones d euros (IVA incluido), hoy mismo se han conocido los detalles de las ofertas económicas.

Conforme a los parámetros objetivos de las ofertas, las mismas oscilan entre 27.980.119 euros de la más elevada (correspondiente a Prinur/Sacyr) y los 23.320.567 euros de la más baja (Aldesa/Proacon/Pérez Jiménez). La cuantía media se sitúa en poco más de 26,4 millones de euros, lo que supone un ahorro respecto al precio de licitación de casi seis millones de euros. O lo que es lo mismo, un 11,8% de rebaja. De acuerdo con estos detalles, destaca la prudencia con la que las empresas han proyectado esta intervención, sabedores de que los costes ya estimados por la Administración andaluza están ajustados.

Lo que no varía, de acuerdo con la información oficial, es el plazo de 22 meses que se fija para la ejecución la infraestructura que dejó pendiente de finalizar la anterior adjudicataria, Grupo Ortiz. Tomando como referencia este calendario, no parece probable que la realización del túnel que debe permitir prolongar la circulación de los trenes desde el intercambiador de Renfe hasta la Alameda Principal sea una realidad hasta principios de 2020. A esta fase habrá que sumar, posteriormente, los plazos correspondientes a la superestructura e instalaciones, entre otras.