¿Cuánto cuesta ser hermano de una cofradía de Semana Santa? ¿Es el coste el mismo dependiendo de la edad? ¿Incluyen todas las cuotas los mismos derechos? Las corporaciones nazarenas solicitan, desde sus orígenes, a sus miembros un donativo con el que sufragar los diversos gastos que a lo largo del año mantienen con su actividad social y cultual. Un estudio realizado por el cofrade Alejandro Postigo arroja luz sobre las tarifas que cada hermandad requiere para continuar ofreciendo sus servicios.

El informe, en el que se incluyen las 41 corporaciones pertenecientes a la Agrupación de Cofradías de Semana Santa así como la Venerable Orden Tercera de Servitas, desprende que como precio medio un hermano debe abonar 36,82 euros al año. Las tarifas, decididas por las diferentes juntas de gobierno y refrendadas obligatoriamente por el cabildo de hermanos de cada cofradía, oscilan entre los 20 y los 60 euros, dependiendo de diversas variables.

Entre las que menor donativo solicitan se encuentran las hermandades de Gitanos y Mediadora de la Salvación, con la tarifa mínima que se aplica a todos los hermanos por igual. Cuatro euros por encima se sitúan Dolores del Puente, Dulce Nombre y Sentencia. Con 25 euros se encuentra un puesto por encima Humildad y Paciencia.

Por debajo de la media siguen otras 15 corporaciones que comprenden desde los 30 euros -El Rico, Sangre, Misericordia, Traslado, Piedad y Servitas- hasta los 36 en el caso de Humildad, Cautivo, Rocío, Monte Calvario y Sepulcro. Con 40 euros de donativo se sitúan Estudiantes, Estrella, Cena o Dolores de San Juan. Los puestos más altos del ranking los ocupan Huerto y Nueva Esperanza, con 50, y Santa Cruz, con 60.

Sin embargo, todas las cifras deben estudiarse con letra pequeña. Santa Cruz incluye en la cuota de hermano el donativo de salida procesional, por lo que los hermanos restan el coste de procesionar el Jueves Santo en los tiempos de Cuaresma. Igual medida aplica la cofradía del Amor, que solicita 40 euros donde incluye la tarifa para vestir la túnica de nazareno o portador. Nueva Esperanza, por su parte, aplica actualmente una partida extraordinaria de diez euros para sufragar el coste de su casa hermandad.

A su vez existen otras hermandades que tarifican la cuota según la edad de sus hermanos. Salutación solicita un donativo de 20 euros para los hermanos entre los 10 y los 17 años y uno de 40 hasta los 65. Los menores hasta 9 años y mayores de 66 pueden realizar una donación voluntaria. Pasión solicita 20 euros hasta los 18 años y 38 a partir de esa edad, mientras que Fusionadas aplica 22 euros hasta los 14 años y 44 para los hermanos de 15 en adelante.

La Congregación de Mena aplica sus donativos según se tenga o no la mayoría de edad, siendo de 20 euros para los menores de 18 años y de 40 a partir de esta cifra. Expiración, por su parte, divide su cuota en tres tramos diferentes: 10 euros hasta los 9 años, 20 hasta los 17 y un donativo de 35 años a partir de los 18.

Pero uno de los datos menos conocidos para los hermanos de las corporaciones nazarenas es la posibilidad de deducir en la declaración de la Renta estos donativos. La Ley 49/2002 del Mecenazgo permite a los contribuyentes desgravar el 75% de las cuotas hasta los 150 primeros euros destinados a una o varias hermandades. La reforma fiscal realizada en el año 2015 permite esta deducción a partir de la Renta de 2016, aplicándose hasta ahora en un 50 por ciento. Las cofradías que se amparen en esta Ley pueden expedir certificados con los que beneficiar a sus miembros en una actividad de carácter voluntario.

En el apartado de donaciones se incluyen, además, cuantas cuotas extraordinarias y donativos particulares decidan hacer los hermanos, así como las tarifas de salida procesional, independientemente del puesto que ocupe el hermano en la estación de penitencia.