Como toca afrontar dos partidos a domicilio en cuatro días, el Atlético el sábado y el Valencia el martes, el club decidió no volver tras la cita en el Wanda Metropolitano. Así que la expedición que se lleve Míchel se instalará durante cuatro días en Madrid: viajará mañana en AVE a la capital de España y no será hasta el martes cuando, también en tren, se desplace hasta la capital del Turia para preparar el choque contra los de Marcelino.

La estancia en Madrid hará que el club trabaje en las instalaciones de Valdebebas, propiedad del Real Madrid, tanto el domingo con el lunes. Ello supondrá que Míchel tendrá que desplazar a más convocados de lo habitual y que servirá como una balsa de aceite para aislarse del entorno tras los últimos resultados.