Bebo Valdés en Estocolmo. En Málaga. En Nueva York. En Miami. Bebo Valdés en La Habana... Y así, la figura de este músico retratada por medio mundo. Es la base, el eje central del documental Old man Bebo. Dirigido por Carlos Carjas, la obra recorre la historia del cubano afincado en la Costa del Sol recomponiendo su vida a través de retazos en los últimos siete años.

Carjas sigue las andaduras de Valdés con una cámara en la mochila. "Cada vez que sabía que iba a algún sitio me iba y lo grababa. Al principio no sabía muy bien por qué, pero yo lo hacía", explica el realizador. La razón para hacerlo se la dio un momento muy especial. El mismo en el que en Nueva York el músico cubano, durante un ensayo, se levantó para dirigir la orquesta de la ciudad, que interpretaba una melodía suya. "Entonces su sonrisa le decía todo. Y entonces le vi el sentido a todo esto", afirma el realizador nacido en Estados Unidos pero hijo de cubanos.

Porque en ese momento Carjas recordó los años que Valdés vivió recluido en Estocolmo. Desplegando sus incomparables largos dedos sobre pianos de hoteles y establecimientos turísticos. Época en la que componía por puro placer, sin esperar algún día oírlo tocar por toda una orquesta de Nueva York. "Yo me enamoré de esta persona al conocerlo durante el rodaje de Calle 54", recuerda Carjas. La película de Fernando Trueba fue la semilla que propició el encuentro entre ambos y la amistad que luego surgió. Y que aún les une.

La película recoge los momentos del último periodo de Bebo Valdés, que ha sido el de reconocimiento internacional a su música. "Desde Calle 54 a hoy han pasado varios Grammy, varios discos y momentos extraordinarios", comenta el director del documental, que se acuerda entre ellos de los que recogió en la participación del músico cubano en el ciclo La música contada, en el Teatro Cervantes.

Y, aunque hoy Old man Bebo es ya una realidad -ayer fue mostrada en el cine Albéniz y hoy lo será en la Sala UMA- Carjas sigue registrando para la posteridad las palabras de Bebo Valdés. Lo hizo por última vez el pasado miércoles. "Es alguien importantísimo de la música cubana y española y es un deber y un honor poder seguir grabando sus palabras", concluye Carjas. La historia sigue: Bebo Valdés en Benalmádena...