Desde que se anunciara el pasado martes su sustitución como delegado en Málaga de la Consejería de Cultura por Manuel Jesús García Martín, la situación que esperaba a Francisco López, quien ha ejercido el cargo desde 2004, venía siendo objeto de diversos rumores. Ayer, el mismo López admitió que existe por parte de la Junta "la opción para asumir la gerencia del Auditorio", que impulsa el consorcio formado por los ministerios de Fomento y Cultura, la propia Junta y el Ayuntamiento y cuyas obras comenzarán, previsiblemente, el año que viene. No obstante, López puntualizó que "no hay nada cerrado" y que, de momento "y hasta nuevas noticias", volverá a sus clases de matemáticas en su antiguo instituto.

López calificó de "ilusionante" la posibilidad de trabajar para el Auditorio que se construirá en el muelle de San Andrés, "porque es a mi juicio la gran institución que le falta a la ciudad y se trata de un proyecto que aúna mis dos grandes pasiones, la ópera y la música". Con respecto a su trabajo como delegado, y a modo de balance, López destacó que en los últimos cuatro años "se han sentado las bases para el desarrollo de los grandes proyectos culturales de la ciudad" y destacó especialmente la intervención arqueológica del Teatro Romano, "para cuyo remate me ha faltado un cuarto de hora como delegado".