Sin necesidad de recurrir a efectos especiales, ni a alardes en el departamento de maquillaje y peluquería, Les Revenants cuenta una historia fantástica que deberíamos encuadrar en el género zombi pero, como le pasa a la británica In the Flesh, hacerlo sería una descripción muy reduccionista. La premisa que lanza esta ficción disponible en Movistar Series es mucho más profunda: ¿qué pasaría si los muertos retornasen a la vida? ¿Cómo reaccionarían al ver que la vida de sus seres queridos ha seguido adelante sin ellos? ¿Y estos familiares/conocidos que ya han superado o han intentado superar el periodo de duelo?

Con una atmósfera opresiva y un drama coral con un toque muy europeo, Les Revenants sigue los extraños acontecimientos que empiezan a sucederse en un pequeño pueblo alpino. Los muertos vuelven a la vida pero no son conscientes de que llevan varios años muertos y por eso no entienden el terror, el rechazo o la alegría que provocan en sus familiares. En principio parecen ser siete, los mismos que centran todos los capítulos menos uno de la primera temporada, pero su aparición es señal evidente de que algo está pasando desde hace tiempo en la presa y los frondosos bosques que rodean al pueblo.

De la historia es mejor no contar mucho más y que el espectador se sumerja en una primera temporada que casi se ve de un tirón. Pero hay otros dos motivos para no perdérsela: la banda sonora del grupo escocés Mogwai, perfecta para la atmósfera que crea la historia, y los títulos de crédito.

Producida por Canal+ Francia, este drama que va de lo fantástico a lo metafísico, pasando por sus buenos momentos de suspense, va camino de convertirse en un clásico de culto.