La selección española finalizó anoche su concentración en Benahavís al vencer de nuevo a Israel por 76-56, en un partido que se disputó en Estepona. A la espera de los jugadores que se unirán a la siguiente concentración de Madrid, Alberto Díaz y Rubén Guerrero concluyeron su primera experiencia como internacionales absolutos, de momento.

El base malagueño comenzó el partido como titular, finalizándolo con dos puntos, cinco rebotes y tres asistencias, mientras que Rubén Guerrero concluyó con cuatro puntos, cinco rebotes y dos asistencias.

El comienzo del partido en nada se pareció al del sábado. Israel se puso por delante en el marcador con la primera canasta del encuentro , pero el choque era un cúmulo de despropósitos. Imprecisa en el pase y desacertada en el tiro, España no anotó la primera canasta en juego hasta casi el minuto 7 del primer cuarto, momento en el que lo hizo el nuevo jugador del Barcelona Lassa, Pierre Oriola. Los últimos minutos del primer período mejoraron algo el juego, algo que continuó durante el segundo cuarto, llegando al descanso con ventaja (31-23).

Tras la reanudación, España se puso el mono de trabajo. Algo más intensa en defensa y, sobre todo, con mayor fluidez en ataque, los hombres de Sergio Scariolo se dispararon en el marcador, rondando los 20 puntos de diferencia a mitad del tercer cuarto (44-27). Desde entonces, los hispanos siempre mantuvieron ventajas superiores a los 12 puntos, hasta el 76-56 final.