ESTOY en Belgrado y desde aquí he leído que Berni Rodríguez se retira como jugador. Cada día leo la prensa de Málaga por internet. Sigo teniendo mi casa en Marbella, pero en julio y agosto no me gusta estar allí porque hay mucho turista y mucho tráfico. Disfruto más en otras épocas del año.

Berni es un jugador especial. Después de trabajar con él la primera semana en Málaga me di cuenta de que tenía todas las cualidades para estar en el equipo y para ser el capitán. Sabía que su padre era entrenador y que él sabía lo que significaba el cargo, por eso pensé que era la persona idónea para ser el capitán. Era muy joven, todo el mundo tenía dudas, si podía o no tener esa responsabilidad. Pero como soy terco y me gusta tomar decisiones yo dije que sería el capitán, aunque mucha gente no estaba de acuerdo. Mi opinión era que sería el capitán del Unicaja durante muchos años y creo que no me equivoqué.

Berni era un jugador muy bueno para ser entrenado y creo que será también un gran entrenador. No sé si seguirá con la dirección deportiva, que leo que va a ser su primer puesto. Durante su vida, Berni ha tenido muchos grandes entrenadores y tiene las cualidades para ser un técnico perfecto para Liga española. Necesita estar uno o dos años al lado de un gran maestro para aprender, le falta la práctica. Pero lo demás él lo tiene. Como persona, Berni es como una antena parabólica, coge toda la energía y se la da al equipo. Todos las cosas negativas él las convertía en positivas con la ayuda de otros.

Como jugador, Berni no tenía ninguna cosa especial, por encima de lo normal. Pero sí tenía muy buena defensa, estaba entre los mejores defensores de la ACB. Con 19 años podía parar a cualquier americano en el otro lado. Y ésa es una gran cualidad. Si un americano mete normalmente 25 puntos y tú eres capaz de dejarlo en diez es que has hecho un buen trabajo. Y él era capaz de hacerlo.

En mi etapa, el Unicaja no tenía un gran equipo, no había invertido tanto dinero como vendría después, cuando llegaron jugadores como Garbajosa, Brown y otras grandes figuras. Berni era un jugador muy importante. Siempre cuando gana el Unicaja aún tengo una impresión de que gano yo, aunque sea un miligramo. Pienso que dejé una semilla y lo siento como mí club.

Me siento un poco culpable de que muchos de mis antiguos jugadores decidan ser entrenadores, si les ayudé en algo me alegro, también de sus éxitos, aunque es difícil superarme... Estaba bromeando. Con todos ellos tengo muy buena relación. Cada semana tengo una llamada de un jugador distinto, no sólo de Jugoplastika, sino también de Limoges, Panathinaikos, Unicaja... Todo el que estaba conmigo creo que le enseñé algo.

A Berni le diría que se ponga a entrenar porque si empieza ahora será pronto mejor que el 80% de los entrenadores. Ahí disfrutaría, sabría ser un gran técnico. Sólo le falta un periodo al lado de un gran maestro. Yo, por ahora, no entreno. No tengo prisa, espero que llegue algo interesante. Ahora tengo una nieta preciosa que es la que me entrena a mí...